No es mueco. Al contrario, tiene los dientes blancos y parejos. Tampoco es 'malaclase' como uno podría imaginar. Es amable, le gusta hablar de salsa y de buen cine y, mientras conversa conmigo, aprieta una pelota amarilla a ver si se le compone la mano que se aporreó jugando fútbol.
Él es Dany Alejandro Hoyos, tiene 26 años y normalmente se demora media hora convirtiéndose en Suso el Paspi. Pero cuando no está maquillado ni porta la caja y el betún, es un ciudadano del común. O al menos eso pretende, a pesar de que muchos ya lo reconocen en la calle "por la entrevista que hice con Luis Alirio (Calle)".
Dany protege celosamente su vida privada y no quiere, como los superhéroes, revelar su verdadera identidad. "Yo quiero ser un man normalito, de bajo perfil. Yo soy muy dado a mi casa, a mis amigos. Aprecio mucho el cariño de la gente, pero mi trabajo es como el que hace cualquiera, solo que un poquito más reconocido. Yo trato de hacer algo por la sociedad y ya. No me interesan ni el poder ni la fama ni las vanidades", asegura.
Por eso, nada de fotos de Dany. Sí todas las del gracioso y repentista personaje que adoran los televidentes de Telemedellín y que cada día suma más seguidores, dentro y fuera de la ciudad. Su grupo más numeroso en Facebook acumulaba hasta ayer 175.766 fans.
Dany, comunicador social y estudiante de Lengua castellana, vive el mejor momento de su carrera como actor, gracias a su álter ego. The Suso´s Show ha disparado los índices de sintonía del canal local (el miércoles pasado registró 12,9 puntos, superando a las novelas de RCN y Caracol) y ya agotó los puestos para verlo en vivo en la Biblioteca Piloto. Hay casi 17 mil "susofanáticos" haciendo fila, por lo que ya tuvieron que cerrar inscripciones.
Su programa ya es más visto que las novelas de los canales privados. ¿Es más poderosa la risa que la violencia?
"Sí, total. Yo me siento muy orgulloso de generar, con el canal, que la gente se ponga un horario para ver un programa. Los miércoles son de Suso y lo ven en familia. Ya estamos mamados de que nos digan que somos violentos, aunque eso sea una realidad. Lo que estamos tratando es mostrar una propuesta totalmente diferente y eso ha sido exitoso".
¿No le suena hacer humor político?
"Sí me suena, pero no dedicarme a hacer un programa de humor político. Me parece que ya hay mucho de eso y como lo hacen Tola y Maruja me parece excelente. Yo digo dos o tres cositas y las digo desde el lado del ciudadano. Me interesa más el conflicto interno de la gente y cómo la gente vive socialmente".
¿Qué sigue para Suso? ¿Irse para Bogotá a trabajar a un canal privado?
"No. Si uno está bien, contento y tranquilo no tiene por qué irse. No me iría por más plata. Yo miro horarios, opciones y la libertad de expresión que tengo en Telemedellín, y no sé qué tanto tendría en un canal privado".
¿Cómo ha cambiado el Suso de Tutucán, donde empezó, al Suso de ahora?
"Cambia en cuanto a la época. En Tutucán teníamos que ceñirnos a los mediados del siglo XX, mientras que ahora es una personaje actual. No cambian la improvisación ni el repentismo. Antes era más inocente, pero ahora hay que hablar de celulares, de blackberry, del Facebook".
¿No ha pensado Suso cambiar de oficio para que no lo comparen con Heriberto de la Calle, el personaje que interpretaba Jaime Garzón?
"No me choca que me comparen. Incluso, me siento orgulloso. En Suso, la caja de embolar no es un oficio, es una excusa para que haga alguna cosa. Pero nunca embola. Simplemente el embolador le da un toque popular. De todas formas la gente sabe que Heriberto y Suso son diferentes. Puede ser un vendedor de minutos y no cambia en nada".
¿Tiene más personajes aparte de Suso?
"En mi empresa yo he creado más personajes para otras obras y queremos hacer más, como un político y un gomelo. Yo me dedico a crear y el humor es una herramienta. Y Suso es uno más".
¿Cuál ha sido su invitado más divertido?
"Yo me reí mucho con Luz Amparo Álvarez. Todos han tenido su toque... el de J Balvin me gustó mucho, el de Hebert Vargas y el que hice este miércoles con Galé".
¿Y los más duros de entrevistar?
"Sergio Fajardo, Genari Magrans (director de Culture Fit Medellín) y Aura Cristina Geithner. Genari porque es extranjero y era más institucional. Fajardo, porque es muy difícil entrevistar a políticos y que uno no tome partido. Fue muy exigente mentalmente. Y la Geithner porque fue una cosa de locos. Yo era tratándola de bajar y me daba susto porque el programa es familiar. En general yo me los disfruto todos".
¿Y con la gente qué le ha pasado?
"De todo. Me dicen 'Dame un hijo', me escriben mucho, me mandan helado. Yo no bebo y todo el mundo me manda cerveza y cosas de esas. Hace poco me fui a descansar 15 días a Venezuela, donde le tomé una foto a un detector de misiles y no me cogieron. Si no, aquí estaría todo el mundo en marchas diciendo 'liberen la sonrisa', 'encarcelaron el humor'. Ja ja. Iba en el carro con mi prima, ella recogió a alguien y cuando supo que yo era Suso, se emocionó, llamó a la mamá y todo. Donde uno no cree ahí lo reconocen, pero la gente es muy cariñosa".
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6