Fue en febrero de 1992, en el día cuarto del mes, cuando un joven teniente de 28 años de edad lo apostó todo por el entonces teniente coronel Hugo Chávez Frías y por su ideología: una empresa cuya influencia en la historia de Venezuela pocos pudieron avistar en ese entonces.
El hecho: el intento de golpe de Estado contra el presidente Carlos Andrés Pérez. El personaje: Diosdado Cabello Rondón, el mismo que dio por terminada su carrera militar en cuanto sus compañeros golpistas fueron encarcelados y él permaneció en libertad.
"Cabello dejó la carrera militar pero hoy goza de influencia entre la alta jerarquía militar, con los Generales de su promoción, aunque se dice que él no tiene poder real sobre tropas de niveles más bajos", explica a El Colombiano Emilio Nouel, exdirector de Inspección y Fiscalización del Ministerio de Hacienda venezolano.
El militar retirado decidió entonces complementar su título en Ciencias y Artes Militares, estudiando Ingeniería de Sistemas y un posgrado en Gerencia de Proyectos de Ingeniería.
En sus días tempranos compartió con sus compañeros de juegos la cotidianidad que significó para su poblado natal de El Furrial, en el estado de Monagas, la cercanía de importantes yacimientos petroleros.
El oro negro sería más tarde el recurso que fluiría en las venas del proyecto político que apoya con fiereza desde que en 1999, pasados siete años del fallido golpe a Pérez, Chávez asumió la presidencia del país y lo nombró Vicepresidente.
Hoy, pasado casi medio siglo desde que nació, en el 15 de abril de 1963, Cabello es el presidente de la Asamblea Nacional, y estaría a tres días de asumir, en caso de que Chávez no se juramente en el cargo, la presidencia interina del país, una experiencia que ya vivió en 2002.
En esa ocasión, tras el fracasado golpe de Estado contra Chávez, estuvo al frente del Gobierno el 13 de abril, hasta que ordenó trasladar al Presidente al Palacio de Miraflores desde la isla La Orchila, en donde éste se hallaba prisionero.
Ese año fue nombrado Ministro de Interior y Justicia y director de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones. En 2004 fue elegido Gobernador de Miranda y, cuatro años después, entregó el cargo al opositor Henrique Capriles tras ser derrotado en las urnas.
Pero no tardó en encontrar trabajo como Ministro de Obras Públicas, cargo que ejerció por un año. En 2011, representando al oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela, llegó a la Asamblea Nacional, organismo cuya presidencia ostenta desde el año pasado y que continuará dirigiendo tras ser ratificado éste sábado en el cargo.
Casado y con cuatro hijos, Cabello lidera el ala militar del chavismo con un discurso calificado a menudo como encendido y radical.
"Él conoce más el medio y convence más a los oficiales militares como la persona más afín a los intereses de la Fuerza Armada", dijo el General retirado Manuel Andara en conversaciones con este diario.
Pero su figura no está exenta de manchas negras, debido a acusaciones de corrupción por parte de la oposición e incluso de excompañeros de Gobierno. "Hay denuncias dentro del chavismo sobre manejos turbios de contrataciones estatales -señaló Nouel- pero Cabello es hoy por hoy un hombre muy poderoso desde el punto de vista político, tras acumular fuerza, en silencio, durante los últimos tres años", puntualizó.
Pico y Placa Medellín
viernes
no
no