La economía venezolana registró un retroceso del 2,9 por ciento en su Producto Interno Bruto (PIB) al cierre de 2009, indicó el presidente del Banco Central de Venezuela, Nelson Merentes.
Destaca que es la primera caída que sufre la economía venezolana en los últimos cinco años. El declive, según Merentes, vino impulsado por una desaceleración del sector petrolero del 6,1 por ciento, muy superior al retroceso de la actividad no petrolera, del 1,9 por ciento.
El petróleo es considerado el "motor" de la economía venezolana ya que aporta cerca del 50 por ciento de los ingresos del presupuesto nacional y cerca del 90 por ciento de las divisas.
Las exportaciones de petróleo alcanzaron los 57.610 millones de dólares, un 35,3 por ciento menores a las de 2008, cuando llegaron a los 89.128 millones de dólares.
Ello afectó a las exportaciones totales del país, que se situaron en 60.936 millones de dólares frente a los 95.138 millones de 2008, una caída del 35,9 por ciento.
Las importaciones se redujeron el 22,2 por ciento: de 49.482 millones a 38.500 millones de dólares en 2009.
La actividad manufacturera descendió un 7,2 por ciento, el comercio un 8,2 por ciento y el consumo, un 1,8 por ciento. En contraste, crecieron la construcción creció un 3,1 por ciento, las comunicaciones un 10,1 por ciento y la generación de electricidad y agua un 4,6 por ciento.
La inversión también retrocedió un 7,6 por ciento y el desempleo subió un punto respecto al final de 2008 al situarse en el 8 por ciento.
Todo ello se enmarcó en "la incertidumbre por la recuperación de la economía mundial", dijo Merentes.
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