Por el nerviosismo de que el Gobierno pueda tomar medidas para suavizar la revaluación del peso frente al dólar, la divisa estadounidense cerró ayer a 1.759,37 pesos, un incremento del 0,13 por ciento frente a los 1.750,90 pesos en que abrió.
Durante la jornada se alcanzó un precio máximo de 1.761,90 pesos y un mínimo de 1.757,45, y se negociaron 634 millones de dólares en 1.079 operaciones, inferior al promedio diario usual que ronda los 1.000 millones.
"Como ya llegamos al famoso 1.750, la gente toma utilidades o se ponen nerviosos porque el Gobierno pueda tomar medidas", dijo Camilo Pérez, jefe de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá, quien considera el bajo volumen de negocios como una medida previsiva.
Operadores consultados por Reuters mencionaron que la Dirección de Tesoro Nacional está comprando dólares en el mercado de futuros, lo que interpretan como que el Gobierno está preparando medidas.
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