Para hablar de calidad en cuidados intensivos tenemos que considerar varios aspectos como recurso humano, infraestructura, tecnología, actividades por procesos, indicadores de gestión e indicadores de eventos adversos.
Todos estos componentes deben estar dirigidos a la seguridad del paciente, quiere decir entonces, que todas las decisiones en cualquiera de estos aspectos van encaminadas a no hacer daño, a obtener mejores resultados y a devolverle a la sociedad un ciudadano que pueda asumir nuevamente su rol social.
Desafortunadamente, aunque tenemos en cuenta todas estas variables que son controlables, hay unas que no dependen del equipo tratante, sino de la respuesta individual del ser humano, cada individuo según su genética, su condición social, sus comorbilidades, sus creencias, etc., responden de manera diferente a una injuria, a pesar de tener el diagnóstico apropiado, la mejor intervención, la oportunidad indicada.
Es así como el paciente puede tener una respuesta no esperada y desarrollar infecciones asociadas al cuidado, úlceras de presión, daño pulmonar al ventilador, delirio, desacondicionamiento físico, estrés pos-hospitalización en UCI, etc. Esto sucede en un porcentaje no despreciable y que no depende del mejor quehacer en UCI, sino que es el precio de la gravedad de la enfermedad y las intervenciones realizadas.
La responsabilidad médica
Para conocer en detalle todas las variables que podemos controlar en la Unidad de Cuidados Intensivos, UCI, lo fundamental, en mi opinión, es el liderazgo del especialista en medicina crítica y cuidado intensivo.
Este personaje que además de estudiar una especialización dedicada a adquirir el conocimiento, la destreza y la competencia para entender el paciente agudamente enfermo y que tiene como responsabilidad el paciente más grave -que llega a cualquier centro de alto nivel-, tiene una personalidad sui generis.
No puede tolerar la derrota, siempre está emprendiendo nuevos caminos en el manejo del paciente, tiene la capacidad de controlar más de 100 variables a la vez, mantiene en su cabeza la evolución, diagnóstico y conocimiento en detalle de las respuestas de cada uno de sus pacientes, también tiene la capacidad de trabajar en grupo, coordinar el personal de enfermería y auxiliar en pro del paciente, comunicar a los familiares y paciente sus posibilidades y todas las intervenciones que se les hará.
No puede tolerar la frustración, también debe tener la capacidad de persuadir a los administradores sobre las inversiones más costo efectivas en su unidad, y mostrar los mejores resultados esperados en rentabilidad social y económica para poder mantener en funcionamiento de la mejor manera estos servicios, que demandan grandes inversiones en tecnología y recurso humano.
La formación académica
Anteriormente era necesario acudir a las universidades extranjeras, hoy en día contamos con programas en las mejores instituciones del país y en las principales ciudades, cada día hay más recurso humano universitario, formado para cumplir con los retos que nos imponen los pacientes en las Unidades de Cuidado Intensivo.
Desafortunadamente las nuevas normativas de habilitación en salud, en vez de proporcionar recursos para seguir con la formación de estos especialistas, permiten que en estos servicios de alta complejidad, ingresen médicos sin la preparación suficiente, desmotivando a las nuevas generaciones a continuar su formación en medicina critica, reflejado en que ya vemos cada vez menos aspirantes a esta especialidad, menos liderazgo en las UCIs, donde el director de orquesta está pasando a un plano pasivo, sin protagonismo y se está permitiendo el manejo fragmentado de los pacientes, sin el articulador de la multidisciplinariedad que es el intensivista responsable de la unidad en cada turno.
Por mucho que se trabaje en los aspectos de infraestructura, tecnología, procesos, sin el liderazgo de un especialista en medicina crítica, los resultados finales no serán los esperados, como se demuestra en muchos estudios de calidad en UCI.
* Especialista en Medicina Critica-Cuidados Intensivos.
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