El estadio municipal de Itagüí, que hace seis meses estrenaba una pomposa iluminación que costó más de 6.500 millones de pesos, hoy está en el limbo por cuenta de la salida del municipio del equipo profesional Águilas Doradas.
Todo suscitado por la polémica que hubo entre la administración municipal y el club que participa en la Primera División del fútbol colombiano, quienes no llegaron a un acuerdo económico que siguiera haciendo de Ditaires, el nido de las Águilas.
Jorge Eliécer Echeverri, Secretario Jurídico del municipio, aclaró que el comodato que el municipio tenía desde 2009 con Águilas Doradas para la utilización del estadio finalizó en enero de este 2014 y que dicho contrato no tenía estipulada prórroga alguna, por lo que iniciaron un litigio para que el escenario pueda utilizarse por el municipio con actividades recreativas y sociales. El equipo argumenta que la prórroga era automática y por eso el pleito se resolverá por parte de la Justicia Contenciosa Administrativa.
De la iluminación poco se disfrutó
En total fueron seis meses de obras y 6.597 millones con dineros públicos los que se invirtieron en la iluminación del estadio.
Una inversión pequeña si se tiene en cuenta que el presupuesto del municipio en este 2014 es de cerca de 376 mil millones, pero una cifra preocupante si se considera que no habrá fútbol profesional en el recinto, mínimo, en lo que resta de la temporada.
Se calcula que con esos recursos se pudieron haber entregado 812 subsidios para mejora de vivienda (ocho millones cada uno aproximadamente).
Cuatro torres de 51 metros de altura y 360 bombillas traídas desde Italia, dejaron a Ditaires como uno de los escenarios deportivos mejor alumbrados del país, con capacidad para albergar eventos de talla internacional como la Copa Libertadores o la Copa Sudamericana.
Desde el 15 de febrero que se estrenó, solo cinco veces se utilizó el alumbrado: contra Fortaleza, Alianza Petrolera, Equidad, Nacional y Junior.
Carlos Mario Martínez, exconcejal de Itagüí, expresó sobre el tema del estadio que ellos en su momento desde el concejo cuestionaron la inversión porque les pareció elevada, pero que la decisión era exclusiva de Carlos Andrés Trujillo, alcalde del municipio.
Jose Ignacio Usma, actual corporado del Concejo de Itagüí, considera que aunque la inversión era necesaria, el valor de la obra fue desproporcionado, además de cuestionar que el argumento del Alcalde para sacar al equipo del municipio no tiene razón de ser porque las escuelas de fútbol en este momento le cuestan al municipio 7.200 millones de pesos al año
Lo cierto es que el escenario, ícono del municipio del sur del Vale de Aburrá, no albergará Fútbol Profesional Colombiano en lo que resta del año. Posiblemente ninguna actividad pública más. La inquietud es que el que fuera el nido de las Águilas por varios años, se convierta en elefante blanco. No dorado.