La Fiscalía General de la Nación acusó ante la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia al general (r) Lelio Fadul Suárez Tocarruncho , por la falsa desmovilización de la cuadrilla Cacica La Gaitana.
Suárez, quien fue jefe de inteligencia del Ejército Nacional, deberá comparecer en juicio por los delitos de peculado por apropiación en favor de terceros, porte de armas de fuego, porte ilegal de armas de uso privativo de las Fuerzas Armadas y fraude procesal, según el documento de acusación al oficial, que fue presentado ante la Corte Suprema de Justicia.
En una audiencia pública en la Sala Penal de la Corte, un fiscal delegado ante este tribunal advirtió que el desarme en 2006 del llamado Frente Cacica Gaitana de las Farc fue “una farsa, un fraudulento montaje”.
La desmovilización de la cuadrilla fariana tiene relación con una supuesta rendición de 62 presuntos guerrilleros en el suroeste del país, la mayoría de los cuales eran indigentes o desocupados que fueron reunidos a última hora por iniciativa de un desertor, con apoyo de militares y con financiación de un narcotraficante que se infiltró.
Según la investigación de los hechos, los responsables de este supuesto falso desarme utilizaron dinero del erario para, entre otras cosas, comprar armas a paramilitares que sirvieron para dotar a los presuntos insurgentes.
Además del general Suárez, quien está detenido desde el pasado mayo, con el caso están vinculados otros dos militares y Luis Carlos Restrepo , exalto comisionado para la Paz en la gran parte de los dos gobiernos del expresidente Álvaro Uribe Vélez (2002-2010). También están acusados el exguerrillero Olivo Saldaña y el supuesto comandante de la cuadrilla, Felipe Salazar , alias “Biófilo”, quien ha colaborado con la justicia.
Luis Carlos Restrepo abandonó el país a comienzos de este año y su paradero es desconocido.
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