María José Pizarro, hija del Carlos Pizarro, le envió una carta este viernes al fiscal General, Eduardo Montelaegre, para manifestarle su preocupación por los pocos avances que ha tenido el caso sobre la muerte de su padre, a pesar de que hace tres años su crimen fue declarado de lesa humanidad.
En la misiva que le envió al jefe del ente acusador, la hija del excandidato presidencial de la Unión Patriótica, asesinado en 1990, asegura que hay una ausencia e indiferencia de parte del Estado para descubrir la verdad de los hechos que ocurrieron alrededor de la muerte de su padre y que hasta hoy se encuentra en la impunidad.
Por ello, le solicita a Montealegre que delegue un fiscal que se dedique exclusivamente a los crímenes de lesa humanidad y que tenga un equipo de apoyo suficiente que le permita "obtener resultados en un plazo razonable".
Además, expresa que apenas ha habido avances en este caso pese a la declaración de lesa humanidad realizada el 26 de abril de 2010 y que, según dice, suponía un cambio de actitud acerca de la forma como se había llevado la investigación durante 20 años.
Para Pizarro, esto ocurre en parte porque el fiscal encargado tiene cerca de 50 procesos adicionales y, asegura, no cuenta con "un equipo de investigación suficiente y permanente" que hace que los progresos "sean nulos", lo que evidencia "una falta de voluntad jurídica y política".
En su carta, la hija de Pizarro añade que "la continuación de este escenario de lentitud me preocupa porque pone en peligro la acción de la justicia con relación a las responsabilidades del DAS y el Estado colombiano", en el asesinato.
Asimismo, añade que a medida que pasa el tiempo se vuelve más difícil "la preservación y consecución de pruebas, la búsqueda de responsables y el esclarecimiento de lo sucedido". Lo anterior, dice en la carta, alimenta la "impunidad reinante" del caso.
La hija de Pizarro considera que desde sus inicios la investigación se ha desviado para esconder la responsabilidad de grupos paramilitares, miembros de DAS y de la Fuerza Pública.
"No se han seguido con rigurosidad los procedimientos de investigación, se han perdido innumerables pruebas, testigos claves han muerto por causas naturales o han sido asesinados", señala.
Hacia el final de la carta, Pizarro le pide a Montealegre "más que respuestas formales, acciones concretas (...) para que no se deba esperar otros 23 años" en el derecho que le asiste a la verdad, justicia y reparación.
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