El líder del golpe de Estado en Mauritania dijo que su junta militar continuará teniendo bajo arresto al depuesto presidente "por razones de seguridad" e instó a sus aliados y a las naciones árabes a mostrar comprensión con su postura, reportó este sábado un diario local.
Mohamed Ould Abdel Aziz no explicó las preocupaciones de seguridad que evitan la liberación del presidente Sidi Mohamed Ould Cheikh Abdallahi, pero dijo al diario Asharq al-Awsat que el derrocado líder goza de buena salud.
"No liberaremos al presidente depuesto por el momento por razones de seguridad. Ahora estamos tratando de que la calma prevalezca y de evitar una escalada", dijo Abdel Aziz, quien derrocó a Abdallahi después de que éste intentara despedir a altos oficiales.
Abdallahi está detenido en una ubicación desconocida. Su hija, liberada de arresto domiciliario junto al resto de su familia por la noche del jueves, dijo que necesitaba atención médica.
Suspensión prevista
La Unión Africana anunció este sábado que suspendería a Mauritania hasta que la democracia sea restaurada.
Abdel Aziz señaló que su junta compuesta por 11 militares "no tiene problemas con Francia o Estados Unidos", tras ser consultado por las demandas de la comunidad internacional para que devuelva a su cargo al primer presidente democráticamente electo del país.
"Pedimos a nuestros hermanos árabes o a nuestros amigos que entiendan la posición y compartiremos nuestras razones con ellos", sostuvo. "El problema que sucedió en Mauritania es un asunto interno", agregó.
"El presidente depuesto se derrocó a sí mismo con una serie de malos pasos que hizo últimamente, sacando al país de las riendas de la democracia", aseveró, sin dar detalles.
Mauritania ha sido vista como un aliado de Estados Unidos en su lucha contra el terrorismo, mientras que Al Qaeda ha intensificado sus ataques en la región en los últimos años.
