El Congreso de Perú abrió este miércoles, con un minuto de silencio, el debate para suspender temporalmente o derogar el polémico decreto legislativo 1090, cuyo contenido derivó en unos violentos disturbios, que la semana pasada dejaron más de 30 muertos en el norte amazónico del país.
El presidente del Congreso, Luis Velásquez, anunció que el debate tendrá una extensión de dos horas en las que se evaluará la conveniencia de modificar la puesta en vigencia de la norma, que actualiza las leyes forestales y de fauna silvestre.
El decreto 1090 buscar regular y supervisar el manejo de los recursos forestales y abre la posibilidad de concesionar para el ecoturismo y la conservación, pero los pueblos nativos rechazan el hecho de que haya sido aprobada sin una consulta previa, conforme a la legislación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
El Gobierno promovió la referida norma para adecuar su legislación al Tratado de Libre Comercio firmado con Estados Unidos el año pasado.
El pleno del Parlamento guardó un minuto de silencio por las 33 víctimas, entre policías y civiles, de los enfrentamientos ocurridos en la ciudad de Bagua, región del Amazonas, entre indígenas y agentes el pasado viernes.
El oficialista Partido Aprista Peruano reunió los votos necesarios, entre los opositores de Unidad Nacional, la fujimorista Alianza por el Futuro y la Alianza Nacional, para suspender la vigencia de la controvertida ley y formar una comisión de alto nivel que elabore una nueva norma forestal.
El presidente peruano, Alan García, recordó esta mañana que el Congreso siempre tiene la posibilidad de modificar las leyes, que han derivado en un paro indefinido de los pueblos amazónicos por presuntos perjuicios para sus derechos sobre la tierra.