El jean, antes de ser jean, era una carpa. Hace 150 años las carpas usadas en la minería eran elaboradas con ese material que resultaba resistente al rigor de las actividades al aire libre. Brindaban calor y protección en los tiempos fríos del oeste estadounidense.
Luego se vio que este material resultaba versátil y durable para la confección de prendas de vestir, también para los obreros que tenían más exigencia física y debían pasar muchas jornadas sin un cambio de atuendo.
Los jeans nacieron con el 501, una referencia de Levi’s que, a mediados del siglo XX trascendió el uso masivo por parte de la clase media y se convirtió referente de libertad y expresión de autonomía. Carlos Mario Gómez, director de Mercadeo de Levi’s, explica que la referencia legendaria de la marca hace parte de la historia del denim y que no deben pensarse por separado.
Muchos personajes importantes de la mitad de siglo pasado -dice Carlos Mario- inmortalizaron esta prenda. La rebeldía de James Dean llevaba unos 501, la creatividad desbordada de Jackson Pollock también, la sensualidad de Marilyn Monroe, también se vestía de 501.
¿Qué hace a esta referencia un ícono? Gómez afirma que "además de la calidad, resistencia, diseño, respaldo, está lo que significa tener una marquilla que dice Levi’s 501. Es el significado de esta marca, la historia que hay detrás, es un sello de estilo.", dice.
El denim, tan apetecido por diseñadores en todo el mundo, ha sido usado por otras marcas en nuevas expresiones que, por un tiempo, le quitaron protagonismo a la etiqueta clásica. Pero hoy está de vuelta.
Lo dice Elgar Johnson, editor jefe de la revista especializada i-D magazine. "Creo que el regreso en las pasarelas de los 501 hacen parte de una respuesta a la predominancia de la silueta skinny, queremos volver a las raíces".
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