Uno es bien serio, Juan Diego. El otro extrovertido, Alejandro. Pero llevan la misma sangre y el apellido, Ramírez, que suena fuerte en la Vuelta a Colombia.
El más veterano (41 años) no duda en calificar que "Alejandro es muy loco". De inmediato la respuesta "es que todavía vivo solo, mientras mi primo ya tiene un hogar".
Casi nunca se separan, viven al frente en La Ceja, donde salen a entrenar y a tomar tinto cuando no están en carretera, para hablar de lo que les apasiona y viven: el ciclismo.
Están felices porque el apellido Ramírez está de moda a raíz del liderato de Alejandro, 31 años, y el sexto lugar en la general de Juan Diego.
Y mientras el joven chatea, el mayor aprovecha para destacar el buen momento que vive su primo hermano: "debe aprovechar la oportunidad que se le está dando. Tiene condiciones para ganar porque anda bien, cogió una buena diferencia que se puede ampliar, pues cuenta con un gran equipo".
Antes de que termine de hablar Juan Diego Ramírez , el líder, replica que es "la primera vez que me monto al liderato y va más de media Vuelta. Esto me tiene contento, con confianza".
La experiencia de 25 años en el ciclismo y dos subtítulos en Vuelta, le permiten al mayor de los Ramírez conocer las debilidades del integrante del Aguardiente Antioqueño, que para él son mínimas en esta ocasión, "porque se encuentra en un alto nivel que le permitirá ganar la ronda si corre con inteligencia".
Eso espera, porque antes fueron muchos los regaños, ya que a pesar de tener grandes condiciones, las desperdició. Alejandro Ramírez se ríe y certifica que se inició viendo correr a su primo cuando pasaba las vacaciones en su casa.
En carretera ambos defienden sus intereses, uno del Aguardiente Antioqueño y el otro de Supergiros-Redetrans. "Claro que si vamos adelante, yo gano la etapa y él la Vuelta, porque me lleva mucha diferencia", anuncia Juan Diego.
Y pareciera que el "loco" fuera él, porque no para de hablar. Debe ser la emoción de ver a su familiar en el liderato. "Lo único que le repito es que esté tranquilo, siempre a la expectativa de los rivales como Félix Cárdenas que ataca mucho".
Alejandro, quien viene de ganar la Vuelta a Cundinamarca, espera que después de 13 años en el ciclismo le llegue la hora del gran triunfo en el certamen más importante del país. "Tengo un gran equipo, sabemos que las etapas serán duras, especialmente las tres últimas, pero aspiramos a llegar a Antioquia con la camiseta y después ver qué pasará en la contrarreloj" al alto de Las Palmas. "Veo a Alejandro campeón", sentencia Juan Diego, frase que deriva en un abrazo de gratitud.
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