Con una misa a las 11:00 a.m. en el recinto de la Asamblea se conmemoran hoy los 25 años de la muerte del entonces gobernador de Antioquia, Antonio Roldán Betancur, quien fuera asesinado por las fuerzas del narcotráfico en la madrugada del 4 de julio de 1989.
Para el magnicidio que acabó con su vida fue accionado un carrobomba que estalló contra la caravana que lo llevaba a su despacho, a la altura de la calle 47D con carrera 72, en el barrio Estadio.
La eucaristía la organiza la Fundación Antonio Roldán Betancur, que extendió invitación a diversas personalidades de la política y la dirigencia antioqueñas, incluidos los gabinetes de la Alcaldía de Medellín y de la Gobernación.
Raúl Castro, organizador del evento junto a Rosa Roldán Betancur, hermana del asesinado gobernador, espera que la dirigencia antioqueña asista masivamente a la ceremonia del que considera un líder "vil y erróneamente asesinado por las fuerzas del narcotráfico", que en esos años sostenían una guerra a muerte contra el Estado colombiano, que buscaba capturarlos y extraditarlos a Estados Unidos, donde eran solicitados por ese delito.
"El doctor Antonio Roldán fue un trabajador incansable que luchó por los campesinos y toda la gente que necesitaba ayuda", comentó Castro, que lo conoció muy de cerca y que fue el fundador de la unidad de televisión de la Gobernación en esos años.
Incluso hoy, a las 8:30 a.m. por el canal Teleantioquia, Castro presenta el documental "Homenaje póstumo del pueblo de Briceño", que narra las visitas del mandatario a la localidad del Norte, donde nació el 17 de febrero de 1946.
El video incluye un entierro simbólico que le ofrendaron los habitantes del municipio y de la región.
Federico Velásquez Arroyave, dirigente antioqueño y quien se desempeñaba como alcalde encargado de Medellín en el momento del magnicidio, lo recuerda como "un hombre sencillo, colaborador y con nuevas ideas que, como médico, sirvieron a la salud".
El gobernador fue un promotor de la paz y del deporte y durante su gestión recalcó en la necesidad de la paz para la región de Urabá, donde el hospital de Apartadó, población en la que llegó a ser alcalde en 1975, lleva su nombre.
También fue director ejecutivo de Coldeportes Antioquia (hoy Indeportes) y gerente de la Fábrica de Licores de Antioquia (FLA) y del Atlético Nacional.
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