El actor Eddie Redmayne pasó siete meses trabajando con un coreógrafo para prepararse para el mayor papel de su carrera, irónicamente el de un hombre al que una enfermedad reduce al mínimo su capacidad de movimiento en manos y cara.
Ese hombre, el astrofísico británico Stephen Hawking, es una de las figuras más reconocidas del mundo, por lo que conseguir el papel en la película La teoría del todo dio a Redmayne "un momento de euforia seguido de uno de gran miedo".
Redmayne, un londinense de 32 años, dijo que se preparó y pasó meses con el coreógrafo en clínicas con pacientes de esclerosis lateral amiotrófica(ELA), también conocida como la enfermedad de Lou Gehrig.
Llevó fotos de Hawking de joven a un experto para estudiar las fases de su declive durante 25 años, incluida la pérdida de su voz.
"Pasé seis o siete meses trabajando con este bailarín para que mi cuerpo lo absorbiese", dijo Redmayne antes del estreno de la película en el Festival Internacional de Cine de Toronto el domingo.
Para cuando comenzó el rodaje, el objetivo de Redmayne era tener tan preparada la parte física que pudiese concentrarse sólo en las emociones.Parece que lo consiguió, basándonos en la crítica del propio Hawking.
Hawking "dio a Eddie el enorme cumplido de decir 'Creí que era yo en la pantalla'. Eso dice mucho sobre la actuación de Eddie. Pasó la mayor prueba", dijo el director James Marsh.
El crítico de Variety Justin Chang dijo que la actuación de Redmayne clava los gestos externos sin la innecesaria exageración y predijo que la pelícla de Focus Features triunfaría en la crítica y en las carteleras cuando se estrene en Norteamérica el 7 de noviembre.
Hawking, de 72 años, dio su bendición a la película, aunque esté basada en las memorias de su primera esposa, Jane Hawking, quien se casó con el joven genio cuando le habían dado dos años de vida.
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