La extraña jauría de planetas extrasolares creció esta semana con el anuncio del hallazgo de un planeta en un sistema de cuatro soles.
El planeta orbita un par de estrellas, que a su vez tienen otro par de distantes compañeras estelares.
Se trata de un planeta circumbinario en un sistema de cuatro estrellas.
Y no solo es esa una curiosidad bien llamativa, sino la forma como fue encontrado: lo hallaron astrónomos de la Universidad de Yale con la ayuda de voluntarios que usaron el sitio web Planethunters.org.
A la fecha se conocen solo 6 planetas que orbitan 2 estrellas, pero ninguna de estas es orbitada por otra compañera más lejana.
“Los planetas circumbinarios son el extremo de la formación planetaria”, dijo Meg Schwamb, de Yale, cabeza del artículo presentado en la reunión de la Sociedad Americana de Astronomía en Reno, Nevada.
El planeta PH1 fue identificado primero por ciudadanos científicos que participaron en Planet Hunters (cazadores de planetas), un programa de Yale que enrola gente del público para revisar los datos astronómicos de la sonda Kepler de la Nasa en busca de planetas.
Este es un planeta gaseoso gigante con un radio de 6,2 el de la Tierra, siendo mayor que Neptuno.
PH1 recorre fuera de la órbita de 20 días de un par de estrellas que tienen 1,5 y 0,4 veces la masa del Sol. Gira en torno a sus estrellas madre cada 138 días. A unas 1.000 veces la distancia Tierra-Sol reside otro par de estrellas, que conforman el extraño cuarteto.
“Miles de personas involucradas en Planet Hunters están prestando un valioso servicio”, dijo el coautor Jerome Orosz.
Robert Gagliano, uno de los dos ciudadanos que ayudó a descubrir el planeta, reveló que entró en éxtasis al ver una leve disminución en la curva de luz del par de estrellas captadas por el Kepler, una señal de un objeto transitando por delante que las eclipsaba: el planeta.