A partir de este martes el ex comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, general Rodolfo Palomino López, asume las riendas de la Policía de Carreteras, y, en su lugar, al frente de la seguridad de los bogotanos, estará el coronel César Augusto Pinzón, ex director de la Dijín.
Pinzón aplicará sus conocimientos en inteligencia militar para combatir al micrográfico (pequeño tráfico de droga) en la capital de la República. Además aseguró que no dejará que la delincuencia común atemorice a los bogotanos. Afirmó que la Policía adelantará acciones concretas contra las oficinas de cobro, microtráfico y sicariato que en la actualidad incrementa los índices de homicidio en la ciudad.
Por su parte el general Rodolfo Palomino manifestó que su reto será hacer que la accidentalidad disminuya. “Recibo una Policía de Carreteras con un compromiso de reducir los homicidios por accidentalidad. Lamentablemente el país registra una tasa de muertes por accidentalidad de 6.000 personas muertas y heridas en las vías de Colombia”.
Según el oficial realizará una pedagogía de alto impacto para que los conductores no sean “irresponsables” a la hora de manejar y así garantizar la seguridad de las carreteras colombianas.
Palomino dijo que la seguridad en las vías también será permanente para evitar que los grupos armados ilegales le quiten la tranquilidad a los viajeros.
Cambio en Bogotá
Unas de las primeras medidas del comandante de la Metropolitana de Bogotá será conformar un grupo especializado de 70 uniformados de la Dijín, para combatir el narcotráfico.
“En el tema del microtráfico hay unas ordenes especificas de la dirección general (Policía) y la Alcaldía para lograr judicializar a las personas que se vean comprometidas en este tipo de delito especialmente en el tema de extinción de dominio”, explicó el general Pinzón.
El coronel también dijo que aumentará el pie de fuerza en 2.000 hombres. La mitad de los uniformados se utilizará para reforzar la Sijín.