La Contraloría de Bogotá anunció este lunes que inició un proceso fiscal por el acto que dio clausura del Mundial Sub-20 en la capital del país el 20 de agosto pasado.
La entidad municipal informó en un comunicado que tras las auditorías realizadas se encontró un posible detrimento por 1.919 millones de pesos, de los 4.400 millones de pesos del contrato.
Agregó que se descubrieron varias inconsistencias, como lo relacionado con la iluminación del estadio Nemesio Camacho El Campín, el pago de alimentación, tiquetes aéreos nacionales e internacionales, el pago del IVA y contrataciones de personas extranjeras, entre otras irregularidades.
Uno de los aspectos que más llamó la atención fue la contratación de un chamán. "Se contrataron los servicios de un chamán con el objeto de evitar que lloviera el día de la ceremonia de clausura del Mundial". De acuerdo con la Contraloría de Bogotá, al chamán se le pagaron 3 millones 931 mil 082 pesos y un millón de pesos de viáticos.
También se hallaron irregularidades como facturas y contratos celebrados sin número cuya naturaleza no tiene relación con el evento.
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