A las 10:30 de la mañana inició la audiencia pública en la que los integrantes de la terna para elegir Fiscal General de la Nación y que fue remitida, el pasado 3 de noviembre por el presidente, Juan Manuel Santos, para intentar destrabar la elección que ya completa un año y cuatro meses sin fiscal en propiedad.
El primero en pasar al atril fue el ex procurador Carlos Gustavo Arrieta Padilla, quien consideró de entrada que en el proceso que se lleva en la Fiscalía "hay mucho que hacer", pero la claridad la hizo no por problemas en el manejo que se le ha dado al ente investigador, sino por los cambios que se han dado con el paso del tiempo.
La exposición de Arrieta inició por describir los procesos que tiene la Corte entre expedientes del sistema anterior (escrito) y los que hay bajo el Sistema Penal Acusatorio (oral).
La suma de estos procesos fue la primera preocupación que expresó el aspirante para quien es claro que el sistema actualmente está tan congestionado que en el corto plazo el desbordamiento lleva a considerar que el problema actual sólo se resolvería en cuatro años.
A esto se suman los procesos de especial importancia, los que, de no resolverse con prontitud, generarían una clara impunidad, por lo que reclamó el mejoramiento de los procesos al interior de la Fiscalía, pero aclaró que hay problemas de fondo como son la criminalidad, por lo que llamó la atención sobre la prevención.
Para eso se refirió a cuatro estrategias de mejoramiento: Reducción de procesos que ingresan al sistema, pues habló de más de 900 mil procesos por día. La solución, dijo, sería promover los acuerdos en los delitos conciliables y ampliar la frontera para mirar cuáles son los delitos querellables, siendo estas últimas las que más congestionan el sistema.
De la misma manera, hizo referencia a la estrategia de delimitar las obligaciones de denuncia, que además de ser sólo formales sí congestionan el sistema. Un ejemplo de esto fue precisamente las que se presentan por puros formalismo exigido por aseguradoras o el Fosyga.
La segunda estrategia estaría relacionada con los procesos que salen de la Fiscalía, hay que fortalecer la institución en cuanto a: acelerar expedición de la ley de pequeñas causas, implementar un sistema más ágil en procesos de captura en flagrancia y para esto reclamó la eliminación de la audiencia de acusación, implementar figuras propuestas en la ley 906 (oralidad) esto en el sentido de aplicar figuras como el principio de oportunidad, entre otros.
En cuarto lugar, hizo referencia a la necesidad de especializar más la Fiscalía, pues se han dejado por fuera de las especializaciones y no han tenido en cuenta cinco conductas punibles. Esa especialización debe darse también en los cuerpos de policía judicial como el CTI y la Policía Judicial, esto haciéndose de manera diferenciada entre estos dos cuerpos para copar mayores espacios del delito y así avanzar en la investigación.
En quinto lugar se refirió al desarrollo de un archivo de procesos, teniendo en cuenta los dictámenes de la Sala Penal de la Corte. A pesar de que en muchos casos el archivo puede ser en algunos casos de aplicación temporal, sí ayudaría a descongestionar otros procesos.
La suma de estas cinco propuestas, juntas, ayudaría a agilizar los procesos y acabar la impunidad. El fortalecimiento institucional es otra de las estrategias a las que se refirió Arrieta. Al respecto hizo mención a las personas y las herramientas.
Es necesario terminar de implementar la carrera administrativa, la misma que debe ser revisada para que a los cargos lleguen quienes comprueben el conocimiento en la investigación criminal. Segundo: debe incrementarse el número de los investigadores peritos de la fiscalía, pues el que hoy existe es insuficiente.
De la misma manera debe implementarse el ingreso al CTI. Todo esto debe verse respaldado en el incremento salarial y de las mejores herramientas pues esto hoy no es fácil. La cuarta estrategia fue señalada como la política criminal seria y dinámica que permita orientar la institución hacia la solución de las conductas criminales. En este caso se debe acompañar el esfuerzo de todas las ramas del poder público. Pero la Fiscalía sí debe ser quien promueva las reformas necesarias para luchar contra el crimen.
En este sentido llamó la atención sobre el papel del fiscal y el poder del mismo de cara a los procesos que lleva. En ese sentido se reclamó la creación de grupos especializados para combatir la corrupción. En esos grupos podrían harían parte otras entidades que puedan colaborar en el buen desarrollo de las investigaciones para evitar que se pierdan recursos y dinero del erario.
Otra de las propuestas de Arrieta fue precisamente el fortalecimiento de los grupos que están adelantando investigaciones especiales como la parapolítica, el paramilitarismo, las chuzadas ilegales y los procesos de justicia y paz. Este fortalecimiento se debe dar de manera similar en los acuerdos y el principio de oportunidad que se tiene para algunos delitos.
Por esto el candidato propuso que se adelanten de cara a delitos como el hurto acuerdos que puedan ayudar a la justicia. "Lo que he planteado son metas que podré lograr porque tengo el conocimiento para ello", dijo Arrieta al cerrar su exposición repasando los cargos que ha desempeñado y que le permiten ser idóneo para el cargo en el que el derecho penal es parte de la función esencial. Para esto recordó su desempeño como Procurador General de la Nación.
De la misma manera, el jurista hizo referencia a los procesos que debió llevar en materia de Derechos Humanos y los resultados que al respecto presentó. "No tengo, ni tendré perjuicio personal o político que pueda afectar mi gestión. Los colombianos pueden estar seguros de mi criterio, el cual será el jurídico. El faro de mi rumbo es el derecho", concluyó.