La Corte Constitucional le dio la razón a Luis Ángel Vides Polanco, un joven del Atlántico que le ganó una tutela al Icetex al reclamarle, en 2020, que le garantizara el derecho a la educación.
Su historia como universitario comenzó en 2012, año en el que entró a estudiar Administración de Empresas y le pidió un crédito a dicha entidad para financiar su carrera.
Todo iba bien hasta 2014, cuando tuvo trastornos de ansiedad, depresión y delirio que hicieron que tuviera que medicarse, internarse y solicitar que se le aplazara el semestre.
Ese fue el punto por el que la Sala Sexta del alto tribunal declaró que el delicado estado de salud de Vides imposibilitó sus deberes de tramitar los pedidos que le hizo el Icetex.
La decisión fue celebrada por el joven, quien en diálogo con EL COLOMBIANO contó que esta es una oportunidad para seguir estudiando, ya que aparte del trastorno que padece desde quinto semestre, su situación económica también le ha dificultado ir a clases.
Y es que con la sentencia, la Corte le ordena al Icetex “dar continuidad al crédito educativo” para que el universitario pueda culminar sus estudios en 2022. Además, fija un precedente para que cuando el beneficiario de un crédito esté en una circunstancia grave que lo obligue a suspender sus estudios o impida que cumpla su deber de actualizar datos –como el trastorno psicoaguado de Vides–, el Icetex debe inaplicar su reglamento y permitir la renovación del crédito, ya que es desproporcionado exigir obligaciones en condiciones graves. Para esas situaciones, la entidad deberá tener un trato especial y positivo con las personas.