Del voluminoso archivo de facturas y soportes que liberó la Alcaldía de Medellín la semana pasada, en donde se documenta cómo el despacho del alcalde Daniel Quintero viene usando su caja menor, continúan saliendo a la luz más detalles que muestran el uso que se les dio a esos recursos públicos y el estilo de vida que se han dado en el piso 12 de La Alpujarra.
Durante el pasado fin de semana, una de las compras que salió al flote y volvió a encender la controversia es una cuantiosa cena en un lujoso restaurante de Bogotá, que no solo llamó la atención por el monto facturado, sino por la fecha en que se produjo.
Según puede observarse en las facturas, se trata de una visita al restaurante DonDoh, clasificado como taberna y parrilla japonesa ubicada en el sector de Chapinero, y en el que los comensales disfrutaron de una comida que valió $2.153.498.
Dentro de los ítems que fueron incluidos, aparecen comidas como un RibEye de $453.704, una entraña (corte de carne de sabor intenso, extraído de la parte interna de los costillares) por $127.778, una ración de pulpo por $90.741, entre muchos otros pedidos.
En los soportes puede leerse que la cena se realizó el lunes 23 de enero de 2023 y se pagó a las 8:59 de la noche.
Dicha fecha ha llamado la atención por coincidir con el mismo día en el que se realizó una audiencia en la que la Fiscalía General de la Nación le iba a imputar cargos a la exsecretaria de Educación de Medellín, Alexandra Agudelo, y la exdirectora técnica de Buen Comienzo, Lina María Gil, por las presuntas irregularidades cometidas en ese programa de atención a la primera infancia y madres gestantes.
Dicha audiencia no se celebró porque en el último minuto, el representante legal de la Corporación Colombia Avanza, Henry Paulison Gómez, señaló no tener abogado para la misma.
El proceso, que ya había quedado en suspenso el 19 de diciembre de 2022 por cuenta de otro aplazamiento, terminó reanudándose el 7 de febrero de 2023, cuando la Fiscalía imputó formalmente los delitos y una semana después pidió casa por cárcel para los principales involucrados en la investigación.
Cómo si se tratase de una especie de celebración, o al menos así se ha criticado desde sectores políticos contradictores a la administración distrital, además de la cuantiosa comida, en la factura también figura la compra de una botella de whisky marca Mallacan de 12 años, que costó $700.000.
Este último trago, junto a una botella de cerveza marca Stella Artois, al final no fueron asumidos por el Fondo Fijo Reembolsable de la Alcaldía, pese a que el resto de la cena sí.
“Mientras el escándalo de corrupción en la alimentación escolar continuaba, la factura esta vez superó los $2 millones, menos mal descontaron los $700.000 de la botella de Macallan 12 años con la que al parecer celebraba los hechos de corrupción por los que investigaban su secretaria tras dejar a la deriva la alimentación infantil de Medellín”, reprochó por ejemplo la abogada Gloria Jaramillo, conocida como Tyche, cuestionando el uso del fondo.
La litigante, quien a mediados de agosto publicó un listado de los gastos en los que había incurrido la Alcaldía antes de la liberación de los documentos, resaltó otros recibos curiosos, como uno emitido en 2021 en el Restaurante Bárbaro.
En la visita a ese establecimiento, los comensales incurrieron en gastos que superaron el medio millón de pesos, incluyendo un filete Tomahawk, que suele ser uno de los más cuantiosos y que destaca por su alta calidad.
Como dato curioso, en la parte trasera de la factura aparecen unas anotaciones en las que se reseña ese corte como “prohibido”, señalando que el mismo no podría ser asumido por los contribuyentes.
Otra de las revisiones efectuadas por Jaramillo, consistió en la polémica por una supuesta compra de chorizos realizada en la administración de Federico Gutiérrez, que corresponden a las compras de refrigerios en todo el cuatrienio en el establecimiento Choripaisa.
El acumulado de compras en aquel lugar ascendió a 23 millones, un tope superado por Quintero en un solo mes, anotó la abogada.