El dólar tiene haciendo cuentas a más de uno por la encarecida que ha registrado en los últimos días.
Ayer, por ejemplo, cerró en un promedio de $4.369 y volvió a superar el récord que había alcanzado en la jornada anterior ($4.348).
La situación se ha prestado para generar algo de incertidumbre porque los consumidores se preguntan si esto aumentará más el costo de vida.
Con ese panorama en frente, Juan José Perfetti, investigador del sector agro asociado a Fedesarrollo, explicó que, en el caso de los alimentos, la transmisión de ese mayor costo dependerá de diversos factores, pero no será inmediato.
Los fertilizantes
El experto recordó que los insumos utilizados para la agricultura son traídos de otros países y deben cancelarse en dólar. No obstante, apuntó que muchos productores cuentan con reservas y no se verán expuestos de inmediato al alto precio de la divisa.
Así mismo, explicó que alimentos como las papas, el frijol y la yuca hacen parte de un segmento muy competitivo y sus precios en el futuro también estarán determinados por la oferta: “si hay buena disponibilidad, los precios bajan, si hay escasez, suben”.
Perfetti enfatizó en que las cosechas que ya se están vendiendo en las plazas de mercado no pueden reflejar incrementos abruptos en sus precios porque fueron producidas tiempo atrás y el actual precio del dólar no tiene ninguna incidencia en ellas.
En todo caso, argumentó que “si este fenómeno se mantiene por un par de meses, eso sí afectará los planes de siembra y eso sí se va a manifestar más adelante”.
El comercio
Los comerciantes son grandes importadores y, con un dólar casi en $4.400, serían vulnerables si la moneda estadounidense sigue aumentando.
En línea con ello, María José Bernal, directora de Fenalco Antioquia, señaló que el valor de la mercancía puede verse presionado de manera particular para cada empresario.
“Eso depende mucho del nivel de inventarios que manejen. En realidad esto varía con respecto a los subsectores y el tamaño de las empresas. Los que importan productos no perecederos manejan un periodo mucho más largo de inventarios”, añadió.
Así mismo, apuntó que “en subsectores que importan perecederos —como el de los restaurantes— sí puede verse reflejado el precio con mayor celeridad. Pero yo creo que todo eso está por verse”.
Hay manera se frenarlo
Ya van cuatro días consecutivos en los que el dólar rompe su precio récord. En ese contexto, vale preguntarse si existe algún instrumento para contener el rally.
Alexánder Ríos, analista principal de Inverxia, mencionó que “el Banco de la República tiene una herramienta denominada operaciones de mercado abierto y estabilización, que podría implementar para disminuir la volatilidad del dólar”. Sin embargo, en lo que va del año, el emisor no ha echado mano de este mecanismo.
Ríos dejó claro que este instrumento únicamente puede suavizar las variaciones para que no sean tan pronunciadas, pero subrayó que ni el banco central ni el Gobierno pueden definir el precio del dólar.
Aunque coincidió en que proyectar el precio de la divisa es un ejercicio casi imposible, no descartó que en el corto plazo pueda llegar a los $5.000: “Pero eso no quiere decir que pueda ser un precio sostenible o que sea estático” .