El incremento de los precios del butano y del propano Mont Belvieu en Estados Unidos ha provocado que las empresas distribuidoras de Gas Licuado del Petróleo (GLP) estén afrontando un período de alzas sostenidas en los precios de este combustible.
“Este año, los precios internacionales se han comportado al alza, impulsados principalmente por el crecimiento de las exportaciones de Estados Unidos a la industria petroquímica asiática que ha observado una demanda creciente y constante de GLP como materia prima y por una elevada Tasa Representativa del Mercado del dólar)”, explicó el presidente de la Asociación Colombiana del GLP (Gasnova), Alejandro Martínez, en un comunicado.
Por su parte, Ecopetrol que es el principal productor de GLP en Colombia está destinando cada vez mayores cantidades de su oferta para sus autoconsumos, en procesos que le resultan económicamente más rentables que el mercado nacional del GLP.
“Esta situación implicará que el sector del GLP deberá incluir mayores importaciones en su oferta para atender la demanda interna”, añadió el dirigente gremial.
La demanda
Según las cuentas de Gasnova, el GLP lo consumen 12 millones de colombianos en 1.050 municipios, siendo Antioquia con 2,42 millones de personas el primer departamento en consumo de este material.
“El 22% de las familias en Colombia utilizan este energético para cocción de alimentos, siendo el segundo combustible más utilizado del país para cocinar”, anotó Martínez, quien dijo que la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) está trabajando en la formulación de reformas a la regulación vigente de los precios a los que Ecopetrol comercializa el GLP.
El potencial
La agremiación sostuvo que entre las políticas gubernamentales en materia energética figura fortalecer la transición hacia energías más limpias desde el Plan Nacional de Desarrollo (2018-2022) y el Plan Energético Nacional (2020-2050), en los que el GLP fue definido por el Ministerio de Minas y Energía como un “combustible de cero y bajas emisiones”, y por la Unidad de Planeación Minero Energética (Upme) como el combustible para dicha transición.
Las ventas de GLP crecieron desde el 2019, entre otros factores, porque se contó con suficiente oferta nacional, a precios internacionales bajos. “En 2020 estas ventas crecieron 6,6 % comparado con 2019, y el promedio de crecimiento de los últimos 5 años del sector es del 3,1 %”, precisó el presidente de Gasnova.
Además del uso residencial como energético para la cocción de alimentos, la intención es impulsar nuevos usos, como la sustitución de leña por GLP y el uso como combustible vehicular y náutico.
Actualmente, el GLP se consume envasado en cilindros, en granel (mediante tanques estacionarios que surten el servicio a conjuntos residenciales o establecimientos comerciales e industriales) y en redes de distribución
22 %
de las familias colombianas usan el GLP para cocinar, según Gasnova.