Las ventas externas siguen sintiendo los efectos de la covid-19, aunque en menor proporción. Mientras en abril la caída frente al mismo periodo del año pasado llegó al 52,3 %, en mayo la disminución fue de 40,3 %, lo que al final dejó un saldo para los cinco primeros meses de -25 % con transacciones valoradas en 12.902 millones de dólares.
Retomar el crecimiento no es fácil, pues mucho depende de “la reactivación de la economía mundial, de cómo nos podemos adaptar en esta coyuntura para competir en el mercado internacional”, aseguró el decano de Economía de la Universidad del Rosario, Carlos Sepúlveda.
Pese a la desaceleración generalizada de las exportaciones, las ventas se comportaron muy similar a la tendencia: el mayor aporte lo puso combustibles con 6.260 millones de dólares, los productos agropecuarios, aportaron 24,66 % del total (3.181 millones de dólares) y manufacturas participaron con 20,32 % y 2.621 millones de dólares.
El sector agro, alimentos y bebidas fue el que sintió menos el efecto de la crisis al desacelerarse -2,1 %, respecto del mismo periodo del año pasado. Productos como café, té y especias aportaron 1.090 millones de dólares, aunque su disminución fue de -4,6 %; las ventas de animales y vegetales ayudaron con 716,2 millones de dólares, pese a su caída de -2,8 %, y las legumbres y frutas implicaron ventas por 585,5 millones de dólares, con una caída de -5,2 %.
Petróleo dejó 3.806 millones de dólares y carbón 2.305 millones; mientras de las manufacturas se destacaron los plásticos, con 343,9 millones de dólares y los aceites esenciales, con 231,29 millones de dólares.