Una misión de expertos del Fondo Monetario Internacional (FMI) visitó Colombia a principios de abril, con el fin de evaluar el estado de los principales indicadores locales para emitir proyecciones sobre lo que se espera sea el rumbo de la hacienda del país. La entidad concluyó que la economía está ganando impulso, a pesar de que las condiciones globales son menos favorables, y que el enfoque del Plan Nacional de Desarrollo (PND) es el adecuado, por lo que solicitaron su firme implementación.
El organismo destacó que la agenda de reforma estructural incorporada en el articulado apunta a “impulsar el crecimiento incluyente y mejorar la competitividad externa”, lo cual es positivo.
Adicionalmente, recomendó tener como prioridad una reforma pensional que mejore la cobertura del sistema. Al respecto, Gloria Alonso, directora del Departamento Nacional de Planeación (DNP), anticipó que antes de que finalice este año, es compromiso del Gobierno presentar una propuesta para modificar el regimen de protección social para el adulto mayor.
Cabe resaltar que uno de los objetivos que se plantea el Gobierno en las bases del Plan es crecer a 4,5 % a 2022 con inversiones por 1.096,1 billones de pesos, que provienen de diversas fuentes: privadas (33,1 %), públicas (66,5 %) y cooperación internacional (0,4 %).
De hecho, una de las principales apuestas de la hoja de ruta de Iván Duque es la equidad, a la cual planea inyectarle 510,1 billones de pesos a proyectos de salud, vivienda, educación, entre otros.
“Es una igualdad que vamos a lograr con acompañamiento del Estado en todo el territorio. Esto conecta con e segundo pilar importante: la legalidad (al cual destinan 132,7 billones de pesos). Queremos volver a la cultura de la transparencia, mejorar la gerencia de los recursos públicos, erradicar las economías ilegales, garantizar la tranquilidad de los campesinos y de los inversionistas, de que su apuesta va a generar réditos”, dijo Alonso.
Con respecto al acuerdo de paz y su implementación, el FMI destaca que “debería fortalecer aún más el desarrollo regional”. El PND plantea un presupuesto de 37,08 billones de pesos para la paz (excluidos de los 1.096,1 billones de pesos).
Colombia bien, el mundo no
Con respecto al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), el FMI espera que aumente a 3,6 % en 2019 —antes preveía un aumento de 3,5 %— beneficiándose de las políticas económicas flexibles, migrantes de Venezuela, una reforma fiscal favorable para la inversión, gasto en infraestructura y una mejora de los resultados financieros de las empresas.
“Como reflejo de esta recuperación liderada por la demanda interna, los déficit externos se están ampliando. El flujo migratorio sustancial desde Venezuela conlleva algunos costos de ajuste fiscal, pero con el tiempo conllevaría a un aumento en el producto potencial. Los desafíos fiscales crecientes deberán afrontarse pronto”, dice el informe.
Si bien las perspectivas siguen siendo favorables, los desequilibrios externos se han ampliado y la economía sigue siendo vulnerable a varios riesgos, como un menor crecimiento mundial, un endurecimiento de las condiciones financieras y las continuas presiones migratorias de Venezuela. (Ver Paréntesis)
Con respecto al crecimiento interno, Alonso señaló que el Plan le apuesta a un crecimiento más allá de los cuatro años de Gobierno y que logre la inclusión productiva de varios sectores de la economía y de la población.
“Le apunta, en últimas, a aumentar la productividad de nuestro país para que podamos crecer a tasas por encima de 4.5 % a partir de 2022, unas tasas estables que garanticen que todas estas grandes apuestas son sostenibles en el tiempo”, destacó.
Los expertos destacan
Los directores ejecutivos del FMI elogiaron la gestión macroeconómica y el marco político, los cuales han apoyado la recuperación económica y el progreso continuo de reducción de la pobreza y la desigualdad.
También alentaron esfuerzos para ampliar la base tributaria, mejorar la administración del recaudo, eliminar los regímenes preferenciales para las empresas, reformar el subsidio a la energía y fortalecer la selección y evaluación de proyectos de inversión. Adicionalmente, destacaron la ayuda humanitaria al gran flujo migratorio.
Con respecto a la regla fiscal (que se flexibilizó del 2,2 % al 2,7 % del PIB para 2019), celebraron que, en el contexto del gran choque migratorio, se pueda acomodar el gasto relacionado, al tiempo que se preserve la integridad del ancla fiscal y el objetivo de equilibrio estructural a mediano plazo.
Los directores señalaron que el compromiso de las autoridades con la sostenibilidad fiscal debería complementarse con reformas estructurales para salvaguardar el gasto social y la inversión pública. Con el fin de aumentar los ingresos y aumentar la eficiencia del gasto.
3,6 %
es la perspectiva de crecimiento para Colombia este año, según la entidad.