Cinco años lleva el país esperando porque las redes de conexión a internet de banda ancha móvil crezcan para aumentar la cobertura que, según datos del Gobierno Nacional, no cubre al 50 % de la población.
El plan, que contempla la subasta del espectro de 700 y 1.900 megahercios (MHz) es otra de las apuestas para cumplir tres objetivos: primero, que más colombianos tengan acceso a información; segundo, que se mejoren las conexiones de 4G y tercero, que Colombia dé pasos más contundentes hacia las 5G.
“El Gobierno quiere subsanar el atraso para que los operadores puedan garantizar una mejor calidad en el servicio que prestan y así beneficiar a los colombianos”, afirmó Sylvia Constaín, ministra de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC), a través de un comunicado de prensa.
Entre los problemas más importantes se requiere estimular las suscripciones a banda ancha móvil. De acuerdo con las cifras consolidadas de 2017 de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), Colombia estaba rezagada en ese apartado, pues sólo contaban con 48,8 afiliados por cada por cada 100 habitantes, por debajo de países como Venezuela (50,1), Perú (64,2), Bolivia (76,5) y Argentina (81).
Sobre el anuncio, Juan Carlos Archila, vicepresidente ejecutivo de relaciones internacionales de América Móvil (Claro), aseguró que “se dinamizarán las inversiones en el mercado y representará un paso fundamental para construir un entorno digital robusto, accesible y disponible para todos los colombianos”.
En cambio operadores como TigoUne celebran el anuncio pues supone “la oportunidad para equilibrar la cancha. En el mercado móvil está consolidada la posición de un operador dominante y, por eso, es necesario hacer efectivas medidas que solucionen los problemas de competencia”, aclaró Marcelo Cataldo, presidente de TigoUne.