0,23%
Indicador de Seguimiento a la Economía (ISE) en agosto, según las cifras del Dane.
En los últimos doce meses el gasto de los hogares colombianos totalizó $1.004 billones, cifra récord en los estudios de mercado de la firma Raddar, y que es el doble del presupuesto nacional aprobado para el próximo año, que fue de $502 billones.
El número se conoce horas después de que el Dane divulgara los resultados del Indicador de Seguimiento a la Economía (ISE), que para agosto mostró un crecimiento de 0,23%, menor al 0,97% reportado en julio y al 1,72% observado en junio.
En esa línea, el estudio Gastometría de Raddar señaló que en septiembre se apreció una caída del 2,9% en el gasto de los hogares (que totalizó $82,4 billones) en comparación con el mismo mes del año anterior.
“La desaceleración en el gasto de este mes podría atribuirse a la dinámica de la colocación de créditos, que ha estado en declive, sin embargo, la variación anual en la colocación con tarjetas de crédito para este periodo retomó a terrenos positivos”, se lee en el informe de Raddar, en el que se anota que las cuentas de las familias experimentaron una inflación mensual del 0,53%.
El análisis advirtió que los hogares llevan experimentando una dinámica de contracción del gasto real durante diez meses consecutivos, lo que se traduce en una menor cantidad de bienes y servicios en el carrito de compras si se compara con el año pasado.
“Lo anterior, en primera medida es resultado de una inflación significativamente alta que en el mes septiembre cerró en 10,99% (anualizado)”, agregó el reporte de Raddar.
Del seguimiento a la dinámica de compras de los hogares colombianos se concluyó que en septiembre las familias asignaron más dinero a las canastas básicas como alimentos para el hogar y transporte y comunicaciones (ver gráfico).
Llamó la atención que otra canasta recibió más dinero (comidas por fuera del hogar), posiblemente como una solución a la inflación de alimentos (11,18% anual a septiembre) lo que ha golpeado de manera fuerte a los hogares y lo que se podría interpretar como la búsqueda de precios bajos por parte de los consumidores.
Señales de debilidad
En contraste, la modestia mostrada por el ISE para el octavo mes de este año (0,23%) reafirma, para algunos, la desaceleración en sectores claves de la producción y la generación de empleo como la industria y la construcción.
Desde la presidencia de la Cámara de Comercio Colombo Americana, María Claudia Lacouture, alertó de los perjuicios que en esa coyuntura puede desencadenar un gasto público excesivo, al tiempo que se desincentiva el consumo de los hogares y se profundiza la caída en la percepción de la confianza.
“De cara a los últimos meses del año, que por regla general muestran un menor dinamismo, conviene que exista una atención prioritaria a los indicadores que más nos impactan, y que las decisiones que se tomen en este fin de año y la hoja de ruta prospectiva del 2024, que supone ser un año aún más retador, busquen lograr un equilibro acorde a la capacidad de las arcas financieras”, dijo Lacouture.
Para los analistas económicos de Bancolombia las cifras del ISE evidenciaron que la economía colombiana agudizó sus signos de debilitamiento a efectos de la persistencia inflacionaria y los altos tipos de interés (13,25% es la tasa de intervención del Banco de la República la mayor en 20 años).
Para los investigadores de la entidad financiera la fase de desaceleración económica sería más intensa durante la parte final del año, por lo que prevén un crecimiento de 1,2% del PIB para 2023 completo.
A su turno, luego de la publicación del ISE de agosto, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, se declaró confiado en que economía haya tomado impulso entre julio y septiembre y vuelva a recuperar la senda de crecimiento en el cuarto trimestre del esta año, por lo que mantuvo su expectativa de crecimiento de 1,8% para este año.