“Cuando la culpa es de todos, la culpa no es de nadie” Concepción Arenal.
La mejor forma para que no te digan que estás sucio, es tirarles tanto barro y basura a los demás que ninguno se atreva a acusarte, porque si todos huelen mal, ¿a quién se le puede imputar que sea la fuente?
Esa es, sin duda alguna, la fórmula que están usando los capos de las Farc reunidos en La Habana para enfrentar a los torpes negociadores del Gobierno, que más parecen representantes de su contraparte que de los colombianos de bien.
Los “delincuentes” de las Farc, aunque la academia mamerta luche por catalogarlos como rebeldes o insurgentes, impusieron, o tal vez pudieron hacerlo con la complacencia del Gobierno, la base de los supuestos acuerdos en los que ellos no son...