El miércoles pasado terminó el Ramadán, la fiesta sagrada de la religión musulmana en la que se ayuna durante 30 días desde el amanecer hasta el atardecer. Todas las religiones contemporáneas comparten la idea del ayuno como una forma de darle prioridad al alma sobre el cuerpo. Por ejemplo, en el mundo cristiano se practica durante la cuaresma, en el judaísmo durante el Yom Kipur, y budistas e hinduistas ayunan a lo largo del año, de acuerdo con las costumbres de sus comunidades. Desde el punto de vista religioso, se ayuna para despertar la conciencia y purificar la mente, se interrumpe una experiencia básica humana para ayudarse a pensar en la propia espiritualidad.
Luego vienen las tendencias. Entre los gurús del estilo de vida sano se habla...