Hace un par de semanas leí un artículo en El Tiempo sobre una persona que ante el horror de quedarse sorda le prometió a Dios que si la dejaba volver a escuchar bien pondría sus oídos a disposición de los demás. El milagro se hizo, desde entonces Carolina Calle hace todo lo posible para poner en el papel lo que algunos enamorados no pueden, ella escribe cartas por encargo, les busca solución a los problemas del amor. Tremendo oficio más noble.
Como me suele pasar en la vida, apenas un tema me interesa, al poco tiempo encuentro sin querer algo que se relaciona. No siempre es bueno agotar las búsquedas en Google o en el catálogo de alguna biblioteca, hay temas que uno prefiere que lo sigan hallando a uno.
Fue así como esta semana me topé con las...