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Esta nota no va dirigida a Diego Santos, toda vez que uno no espera reflexión, entendimiento o autocrítica de un fanático, racista, ignorante y pro genocida. Esta nota va dirigida a las personas que han tenido que leer las palabras cargadas de odio, copias baratas del estilo venenoso de Goebbels, escritas por Santos.
Como seres humanos debemos disculparnos por la existencia de tantos Diegos Santos. Tristemente, son ellos quienes justifican crímenes de odio y atacan virulentamente a sus víctimas, demostrando a ultranza que solamente desean la aniquilación de hombres, mujeres y sobre todo niños, mientras ellos mismos se regocijan de su supuesta superioridad moral, cultural e incluso étnica.
Esos Diegos Santos son los que hacen que una víctima sea señalada de victimario, que la mujer violada sea acusada de ser la responsable de su propia violación o que el niño asesinado sea acusado de ser el responsable de su propia muerte con la afirmación obtusa y criminal que “estaba siendo adoctrinado en el odio y mañana será un terrorista”.
Menos mal, la opinión pública ha comprendido que el sionismo es experto en esas revictimizaciones, así como en el uso y el abuso del concepto de “antisemitismo”. También ha comprendido que el ignorante es aquel que frente a una realidad de odio y crímenes prefiere ocultarse en los insultos. La gente entendió que esto no inició el 7 de octubre, sino que inició décadas atrás con la invasión israelí de Palestina. Una invasión que desde el inicio llegó cargada de odio hacia todo lo palestino, negando su derecho a existir.
Por eso la limpieza étnica no inició hoy, inició desde 1947. Cosa que esos Diegos Santos nunca aceptarán.
La opinión pública también comprendió que defender lo palestino no es ser hipócrita, es ser humano. Por soldados que se toman fotos con la ropa interior de las mujeres que han asesinado o con los triciclos de los niños que han decapitado, que hacen “revelaciones de género” volando edificios con civiles dentro o dejando bebes pudriéndose en incubadoras, es que la defensa de lo palestino no es hipocresía sino humanidad. Lamentablemente, falta mucha más humanidad en el mundo. Humanidad que no se esperaría nunca de Diego Santos.
Las personas comprendieron que “nazi” es la muletilla ideal del fanático sionista. Son los Diegos Santos los que vulgarizan esa horrible palabra solamente para reflejar en el otro lo que en realidad son ellos mismos.
Al sionista le fastidia lo palestino, quiere exterminarlo, borrar su pasado y su presente. Da igual que sea católico o musulmán, simplemente para el sionista, el palestino no tiene derecho a existir. No importa cuantas mentiras y manipulaciones deba hacer por el camino.
Por último, la gente entendió que solo el vulgar, obtuso, fanático y racista es quien niega el genocidio que Israel comete. Para el sionista, Israel no comete genocidio, porque los palestinos no son seres humanos.
Lamentablemente como humanidad hemos fallado. En tanto hayan Diegos Santos, habrá carnicería, racismo y atrocidades. Por ello, hoy más que nunca ¡FreePalestine!!!
