Ayer, 16 de febrero, se cumplió un aniversario más de la muerte de Fernando González. Al anochecer de ese día en el año 1964, “no se dirá murió, sino lo recogió el Silencio”, como él mismo calificaba el morir. Para honrar ese silencio suyo, que es vivencia viva en la Intimidad, he releído durante esta semana algunos de los artículos que he publicado sobre el filósofo de Otraparte. Es una forma de reencuentro.
Hoy quisiera compartir con los lectores apartes de una columna de hace venite años largos, cuando apareció en 1997 la edición de la revista “Antioquia” en la Editorial de nuestra Alma Mater, con excelente prólogo del siempre recodado y admirado Alberto Aguirre. El libro bien merece una nueva edición, aunque no sobra decir que www.otraparte.com...