Cuando el bosque puede ser tu jardín: Antes, cuando escuchábamos la palabra bosque, pensábamos en un lugar abierto. En el musgo, la hierba mojada por el rocío y los frutos silvestres o conos de madera caídos después de una derrota con el viento. Lo que no pensamos de niños era que a medida que fuéramos creciendo, el bosque se iría convirtiendo en un lugar privado. Como en Medellín o en Las Palmas. Y es que en nuestra región, el bosque también puede ser ahora el nombre que se le otorgue a una urbanización exclusiva cuyo terreno lleno de naturaleza fue adquirido por una empresa que lo ofrecerá a unos pocos. El problema es que cada vez hay más urbanizaciones privadas con árboles que dejarán de ser públicos. Incluso algunas de esas construcciones...