Es parte de la medicina personalizada hacia la que camina el mundo, aunque a pasos lentos en los países en desarrollo.
Pero es indudable que cada días personas en el primer mundo se secuencian el genoma, su ADN, para saber el riesgo que tienen de desarrollar una enfermedad y tratar de prevenir bien sea con estilos saludables o con intervenciones médicas.
Claro que ni lo uno ni lo otro está asegurado todavía: que el riesgo se convierta en un hecho o que haya forma de atajar ciertas enfermedades. Mas en muchos casos sí.
La secuenciación del genoma ya llegó a la ciudad, dice Juan Carlos Granada Villa, médico, al presentar la IPS Rigs.
Una persona puede acudir a que le secuencien su genoma o pedir que vayan a un lugar determinado. Se le toma la muestra de saliva en un kit especial y se envía a Valencia, España, donde lo secuencian y se compara con una extensa base de datos genética.
¿El resultado? Llega a los 20 días y se aplica en cuatro áreas de interés: predisposición genética a desarrollar enfermedades (como cáncer, diabetes, alzheimer, cánceres y decenas más); compatibilidades farmacológicas; portabilidad de enfermedades huérfanas; y rasgos personales como predisposición a fumar, al alcoholismo, color de piel, cabello y otros datos.
El médico especialista lee los resultados a la persona, interpreta los hallazgos genéticos antes de entregárselos.
Granada Villa dice que son los únicos que ofrecen el servicio global en nuestro medio, aunque del sector salud en ocasiones lo hacen para ver la compatibilidad a una medicina (de alto costo o riesgo, para citar un ejemplo).
Es una prueba costosa que, expresa el médico, es más favorable que los costos que representa la medicina curativa para distintas enfermedades y problemas de salud.
La persona se hace la prueba una sola vez. Como cada vez se conoce la ‘huella’ genética de más enfermedades y la eficacia de los medicamentos con base en los genes, en el portal web queda con acceso a esas actualizaciones.
En el caso de enfermedades como cardiovasculares, para citar otro caso, o la diabetes, los estilos de vida ayudan a alejar el riesgo si este dio alto. Y así con otros males.