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Conozca los secretos que guarda el carriel

Del carriel y el guarniel se tienen referencias en el departamento desde hace 140 años. Quieren que sea patrimonio de la nación.

  • En Jericó, Envigado y Sabaneta se siguen fabricando carrieles, una tradición que suma 140 años. FOTO Camilo Suárez
    En Jericó, Envigado y Sabaneta se siguen fabricando carrieles, una tradición que suma 140 años. FOTO Camilo Suárez
Ese acordeón que es símbolo de Antioquia
25 de mayo de 2020
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Que la estampa de la Virgen del Carmen, que el escapulario, que los dados, las cartas, la peinilla, el tabaco, un espejo, agujas e hilos. Hasta el aguardiente cabía en el carriel de los arrieros, ese que se abre y se cierra como un acordeón y tiene bolsillos bien escondidos, para guardar secretos.

El guarniel es el símbolo de la colonización antioqueña, que llevó a los arrieros, especialmente del Suroeste, hasta el occidente y sur del país, en un territorio que se conoció como la Gran Antioquia y que integraban Caldas, Risaralda, Quindío y Norte del Valle.

A la región llegó hace unos 140 años, como lo asegura el orfebre Rubén Darío Agudelo, que lleva cuatro décadas fabricando carrieles, o guarnieles, como él prefiere llamarlos. Un oficio que aprendió de su abuelo y su padre (Ver Infografía).

Sobre el origen de la palabra hay diversas teorías entre los artesanos, especialmente en Jericó. Una de ellas es que se adoptó de la expresión inglesa carry all (cargar todo). Agudelo aclara que proviene del Norte de África, donde se conocía como Barsuk, un bolso con separadores, que se usaba para largas travesías.

¿Así de importante?

El guarniel es por estos días noticia por cuenta de una iniciativa en la Plenaria de la Cámara de representantes que pretende que sea declarado patrimonio cultural inmaterial de la nación. El Ministerio de Cultura de Colombia explica que esa categoría se le da a “los usos, representaciones y expresiones de técnicas, conocimientos y saberes; a las formas de vida y culturales propias para determinada comunidad o grupo social”.

Las músicas de marimba y cantos tradicionales del Pacífico Sur, las Procesiones de Semana Santa de Popayán y los carnavales de Negros y Blancos, el de Barranquilla y el de Riosucio están en la lista de Patrimonio Inmaterial de la Nación.

Al respecto, Juan Luis Isaza Londoño, director de la Fundación Ferrocarril de Antioquia y exdirector de Patrimonio del Mincultura durante seis años, anota que “lo que se valora, se aprecia y protege legalmente es el saber hacer las cosas, no tanto el objeto, en este caso el carriel”.

Relata que el camino regular para una declaratoria lo establece la Ley general de Cultura, una competencia del Mincultura y del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, “sin embargo, los congresistas pueden hacer leyes, tal y como hicieron con el sombrero vueltiao”. Y como se quiere esta vez con el carriel.

En su concepto, el artesano o portador de la tradición poco se va a beneficiar con la declaratoria, en especial en lo económico. El Ministerio tiene otros instrumentos con los que los orfebres pueden acceder a recursos públicos.

Con la declaratoria se prevé la emisión de la moneda conmemorativa, la construcción de una escultura y las partidas presupuestales necesarias para la salvaguarda del guarniel. La iniciativa ha desatado polémica por el momento en el que se está solicitando, en medio de cuarantena por la covid-19 y una emergencia sanitaria.

“El proyecto es bonito, pero impertinente. En este momento todo se debería estar enfilando hacia la salud y la economía”, opina el escritor y profesor universitario Memo Ánjel.

¿Alguien usa carriel?

Actualmente en Jericó existen 22 talleres dedicados a la elaboración de carrieles, una actividad de la que viven entre 80 y 100 personas. En Envigado hay dos más y uno en Sabaneta. Ya no son los arrieros ni los campesinos quienes llegan a comprarlos, hoy son los turistas, los principales clientes.

“Ya los hay de todos los tamaños y estilos, hasta de animal print, los hay redondos y cuadrados, pero el que más se vende es el tradicional”, comenta Rubén Montoya. Las ferias nacionales e internacionales son otra importante vitrina de ventas.

Ya en su interior no se guardan dados ni barajas, mucho menos cañamo y aguja capotera, tampoco se usa para las travesías en mula, hoy es un accesorio para lucir, guardar documentos o libros, para ir a puebliar, para conectarse con las raíces de una cultura y una tradición, la antioqueña. Esta es una radiografía del carriel, de las historias que cuenta desde su forma.

Infográfico

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