En Colombia le dicen pan de banano, en Argentina torta de banana, finalmente aquí y en la Patagonia el ingrediente principal es esa fruta, pero no cualquiera, la que está a punto de dañarse.
Para el pastelero argentino radicado en Medellín, Agustín Romero, “la mayoría tiene en casa bananas qué se están madurando muy rápido y especialmente con estos calores”.
A lo mejor por eso –piensa él– se puso de moda cocinarlo y en la mayoría de redes (Pinterest, Instagram, Twitter y Facebook) se ven, por cantidades, las imágenes compartidas de dicho alimento horneado. Instagram registra, por ejemplo, más de un millón de publicaciones.
El fenómeno también se da en las búsquedas de Google en Colombia. Al verificar en las tendencias de dicho buscador la popularidad máxima del término se alcanzó en el país el 27 de marzo y el 5 de abril pasados y sigue estable.
La chef María Fernanda Hurtado comenta que el pan de banano es una especie de budín, “su miga es húmeda y pesada” y por eso es tan agradable y delicioso al paladar.
Sobre su origen no hay uno concreto, “podría decirse que ha pasado de generación en generación en nuestra cultura, siendo modificado solo con especias o agregando otros ingredientes, pero su base es siempre la misma”, dice la chef.
Para el pastelero Romero es tan fácil de hacer que quizá es otro factor relevante a la hora de buscar por qué es tendencia e indica la chef Hurtado que lo más interesante es que en esencia se utilizan los bananos “negritos” o que están a punto de perderse, “aprovechando así productos que de otro modo se tirarían”.
A lo mejor, concluyen ambos expertos, al inicio de la cuarentena fueron bastantes los bananos comprados y hoy están ya negros, algo había que hacer con ellos.