El intercambio vial de la 80 con San Juan, una de las obras que servirá al futuro metro que surcará el occidente de la ciudad, quedó habilitado desde ayer para el servicio.
El alcalde Daniel Quintero hizo presencia en el evento inaugural, así como lo había hecho cuando se abrió el de Colombia, el pasado 22 de marzo.
La construcción del puente se retrasó en buena medida por la pandemia. Aunque las obras no estuvieron detenidas mucho tiempo, la Alcaldía dijo que el cese y los problemas de contratación retrasaron el cronograma en su momento.
Otro de los problemas que tuvo la obra fue la desaprobación de una parte de los vecinos que se sintieron afectados y dijeron que sus inquietudes no fueron tenidas en cuenta por la administración.
Lo que sí tuvo a favor la construcción fue la agilidad en la compra de predios, un tema muy álgido en la construcción del par de Colombia con la 80.
Este intercambio tuvo una inversión de $42.000 millones, entre obra e interventoría. Eso sin contar con la compra de predios, para lo que se firmó un convenio con la EDU.
El puente tiene una longitud de 268,5 metros y tiene como finalidad desembotellar el tráfico en el occidente, en particular para los que se dirigen del Centro hacia la comuna 13 o atraviesan por la 80.
Hay que tener claro que este intercambio, más el de Colombia, fueron un compromiso del Municipio para la construcción del metro de la 80. El trato fue que Medellín invierta $1,062 billones para la construcción del sistema. Dentro de ese poco más de un billón está la inversión de los dos intercambios, estimada en $229.000 millones.
Es decir, esa plata fue aceptada por la Nación como un pago en especie. La puesta en operación del puente es un paso previo para que el metro pueda rodar en el futuro.