Cinco días completa la angustiosa búsqueda de Sofía Córdoba Vasco, una adolescente de 13 años de edad desaparecida en el municipio de Caldas, sur del Valle de Aburrá.
El temor en su familia se acrecienta por cuenta de una hipótesis, aún no confirmada por las autoridades, según la cual la menor de edad habría sido víctima de un pedófilo.
“He hablado con varias personas del barrio. Por aquí anda un violador, ha abusado de varias niñas. He hablado con personas a las que les pasó eso”, comentó en la mañana de este viernes Tatiana Vasco, madre de la menor de edad. Y añadió que, de acuerdo con esa información extraoficial, el modus operandi del sospechoso consiste en abordar a sus potenciales víctimas con ofertas de trabajo y luego diezmar su voluntad con escopolamina o agentes químicos similares.
Lo último que se supo sobre el paradero de Sofía fue a las 5:51 p.m. del pasado 8 de marzo, cuando fue a comprar parva a una panadería del barrio La Planta, en el casco urbano de Caldas.
Julián Ospina, comerciante de ropa del sector, le narró a EL COLOMBIANO que este hecho causó indignación en el vecindario. “Apenas supimos de eso, los comerciantes nos unimos y empezamos a mirar las cámaras de vigilancia de los negocios. A nosotros nos dolió porque también somos padres de familia”, indicó.
En una de las grabaciones se ve a Sofía conversando con un hombre en la acera. El sospechoso porta una mochila roja y en el diálogo, de aproximadamente un minuto, se percibe que pudo haberle preguntado una dirección, por las señas que ella hace; después de eso, los dos emprenden la marcha, hasta perderse en una esquina.
En el video se aprecia que el personaje viste tenis negros, bluyín y una camiseta blanca con estampados, es de tez trigueña, frente amplia y pelo negro corto. “”Ese hombre no es conocido de por aquí, no es del pueblo. Parece que a la niña le dieron escopolamina”, reiteró el comerciante.