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Eln dice que no tiene que cumplirle a Duque
La guerrilla pidió al Gobierno Nacional que mantenga la palabra empeñada del Estado en la negociación de paz.
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El grupo guerrillero reafirmó la rebelión como un derecho al que no renuncia mientras negocia la paz. FOTO Manuel Saldarriaga
La delegación del Eln, que espera desde julio la continuidad de los diálogos de paz, aseguró que mientras el Gobierno de Iván Duque no demuestre que cumple las promesas del Estado, no tiene por qué cumplir sus exigencias sin un acuerdo de paz de por medio.
En un comunicado, los jefes de este grupo alzado en armas señalaron que la negativa de Duque de nombrar nuevos negociadores va en contra del Acuerdo General firmado con el Estado, no solo con el gobierno de Juan Manuel Santos.
“Cuando este Gobierno desconoce los acuerdos firmados entre el Estado y la insurgencia, niega que la paz debe ser una política estatal, para que llegue a ser estable y duradera; y además con este desconocimiento, él mismo se invalida como interlocutor válido, capaz de hacer y cumplir acuerdos. Si Duque niega Acuerdos de paz anteriores, ¿qué credibilidad tendrían los futuros acuerdos que él firme?”, cuestionaron. De esos pactos, insistió la delegación, son testigos los miembros de la comunidad internacional y todos los colombianos.
Hay que tener en cuenta que el presidente no cerró la puerta a los diálogos, pero señaló al cumplir su primer mes de gobierno, y después de la evaluación de la mesa de negociaciones, que únicamente nombraría a nuevos delegados cuando el Eln dejara de delinquir y liberara a todos los secuestrados, situación que a su juicio no ha ocurrido, aunque la guerrilla liberó de manera unilateral; es decir, sin protocolos con la Fuerza Pública, a diez de las personas que tenía en su poder. En las cuentas del Ejecutivo son 16 a los que deben dejar libres.
“Si este Gobierno pretende desconocer la Agenda de conversaciones pactada con el Eln y los Acuerdos logrados en su desarrollo, dejaría al descubierto la incapacidad del Estado colombiano para cumplir pactos; y cerraría las posibilidades de paz, al arrojar por la borda lo avanzado”, advirtieron los guerrilleros una vez que el presidente Duque aseguró que cuando estén cumplidas sus condiciones se pactaría una nueva agenda.
En ese sentido, el docente de la Universidad Nacional y experto en conflictos armados, Víctor de Currea-Lugo, manifestó que el primer mandatario no debe caer en el síndrome de Adán, de querer empezar los diálogos de cero, más bien, respetar los avances hasta ahora acordados y continuar las conversaciones según la agenda pactada hace ya más de tres años.
Así mismo, esta guerrilla ratificó su derecho a disentir con el Estado: “El Eln es una fuerza insurgente y no está obligada a cumplir la legalidad del Estado colombiano, hasta tanto no haya un acuerdo de superación definitiva del conflicto”. Mientras tanto, los jefes guerrilleros siguen en La Habana, Cuba, a la espera de que el Gobierno defina la continuidad de esta mesa.
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