Un año después de que el Parque Nacional Katíos saliera de la lista de patrimonio en peligro de la Unesco, Parques Nacionales Naturales destacó que aunque continúan algunas presiones sobre la zona, en el territorio ya hay institucionalidad, tienen listo un plan de trabajo definido de conservación y la tala de árboles ha disminuido.
En ese entones, la Unesco señaló que entre las amenazas que tenía estaban explotación ilegal forestal y cacería, métodos inapropiados de pesca, conflicto armado y presiones por asentamiento.
Julia Miranda, directora de Parques Nacionales, explicó que hoy en día hay un compromiso por la conservación de Katíos, que va desde la Fuerza Pública, los alcaldes y los mismos líderes comunitarios, las Ong y la academia. “Una vez el parque salió de la lista, la Unesco nos puso varias tareas. Por ejemplo, debíamos traer a todos los actores sociales alrededor de la conservación y eso se logró. Además, ya tenemos un plan de trabajo y recursos”.
Nianza Ángulo, directora del lugar, dijo que el reto que tienen no es solo mantener el área en un estado deseable de conservación, el cual se ha venido consolidando, “sino que los territorios colectivos y de comunidades indígenas mejoren su calidad de vida, que no tengan que realizar acciones que perjudiquen el área y que sea todo al contrario; que estas comunidades cumplan funciones en la zona amortiguadora del área protegida”.
Explicó que este año la presión más fuerte que ha tenido la zona tiene que ver con la extracción forestal. “Hay presión en la zona sur donde tenemos como vecinos a una comunidad afro, que son los que tienen como actividad económica la extracción. Por eso la situación hay que abordarla de una manera integral, hay que ir haciendo los procesos sancionatorios, implementando los recorridos de control y vigilancia, articulando todas las corporaciones, al igual que a la Fuerza Pública”.
Por esa razón, ya se suscribió un primer protocolo para abordar la tala de manera interinstitucional y comunitaria. También se hizo un acuerdo de voluntades para trabajar con la comunidad. Cabe anotar que a pesar de estas acciones, el parque está cerrado al ecoturismo.