La Defensoría del Pueblo informó que los dos militares que fueron secuestrados en medio de una asonada de campesinos en La Macarena, Meta, fueron entregados este miércoles a una comisión encabezada por la entidad.
El cabo Christian Rojas Rivera y el soldado Alejandro Perdomo fueron liberados en la vereda El Tapir, de La Macarena, hasta donde llegó la comisión humanitaria, integrada también por el alcalde de la región, el personero y el párroco municipal.
Los uniformados fueron valorados en el lugar por integrantes de la Organización Médicos del Mundo, quienes certificaron su buen estado general, sin signos ni síntomas de enfermedad. Además, se constató por parte de los uniformados la entrega del material de guerra y demás elementos de su dotación.
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En un documento escrito a mano, los labriegos inventariaron los elementos y la dotación que tenían los militares a la hora de su retención, la cual fue verificada y aprobada por los dos militares, aunque el cabo Rojas manifestó que le faltaban dos pertenencias: una cámara y una memoria SD.
La retención de los militares se confirmó el pasado 24 de febrero, cuando voceros de más de 2.500 campesinos reunidos en La Macarena confirmaron que los uniformados se encontraban en su poder desde hace varios días, para poder negociar con las autoridades.
El mecanismo de presión utilizado por los labriegos estuvo motivada en la captura de 20 presuntos deforestadores en medio de la operación Artimsa, en Parques Nacionales, Tinigua, Sierra de La Macarena y la Cordillera de los Picachos.
