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Ocho cartas escritas por Dairo Antonio Úsuga David, alias “Otoniel”, y Roberto Vargas Gutiérrez, alias “Gavilán”, principales cabecillas de la banda criminal “los Urabeños”, revelan algunos planes y hasta temores que tienen los principales hombres de esa organización criminal.
Según la Policía, los manuscritos fueron encontrados en una finca ubicada en zona rural de Arboletes, Antioquia, donde se realizó un operativo el pasado 31 de diciembre.
En tres de los ocho contenidos, alias “Otoniel” propone a alias “Lorenzo”, quien actualmente es el principal cabecilla de la estructura en el Caribe, para que se traslade a la región del Catatumbo en Norte de Santander y copar los territorios que eran dominados por Víctor Ramón Navarro, alias “Megateo”, principal líder del Epl, quien murió en medio de un operativo de las autoridades el pasado 2 de octubre.
“Estamos analizando lo suyo y llegamos a la conclusión de entregarle Cúcuta y Catatumbo”, dice uno de los apartes de la carta que supuestamente le llegó a alias “Lorenzo”, quien ya tenía una respuesta escrita, pero quedó en manos de la Policía antes de llegar a su destinatario, que aparentemente sería “Otoniel”.
“La propuesta es buena, pero hay que mirar con objetividad la situación. Le hago un recuento de esa zona y como se puede dar cuenta los últimos comandantes que intentaron entrar allá acabaron muertos”, fue parte de la respuesta de “Lorenzo” a “Otoniel”.
Otra de las cartas que se encuentra en poder de la Policía, al parecer fue escrita por alias “Gavilán”, en ella, el segundo hombre en importancia de “los Urabeños” se refiere a los pagos de la nómina de uno de los grupos que maneja, pero a quien la remite, le comenta que logró salir con vida de un bombardeo.
“Por acá muy duro ese bombardeo tan verraco que hicieron. Amigo, tiraron fue a matarme”, son las palabras de “Gavilán”, quien aparentemente se refiere a un ataque de la Fuerza Aérea realizado el pasado tres de noviembre en zona rural del Unguía, Chocó, donde murieron 12 integrantes de “los Urabeños”.
“Esto nos permite conocer, de acuerdo con estos manuscritos, que efectivamente hay un impacto significativo contra esa banda criminal, que ese impacto está representado en un desconcierto dentro de la organización, donde ya hay evidencias de deserciones”, concluyó sobre este hallazgo el director de la Policía, general Rodolfo Palomino.