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Así va el misterioso caso del asesinato de Mauricio Leal y su madre
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Mauricio Leal era conocido como un “niño genio” en su gremio. Atendía a celebridades como Cristina Warner y Andrea Serna, que lo acompañan en la foto. FOTO COLPRENSA
El 22 de noviembre, las redes sociales estaban conmocionadas, las célebres clientas de Mauricio Leal, de 47 años, expresaban su incredulidad al conocer las noticias de su muerte. Pronto se reveló que el estilista había sido encontrado en su casa de La Calera junto a su madre Marleny Hernández, de 67 años, con heridas cortopunzantes. Al lado de los cuerpos, una nota que decía: “Los amo. Perdónenme, no aguanto más. A mis sobrinos y hermanos dejo todo. Con todo mi amor, perdóname, mamá. 11.24″.
Quienes encontraron los cuerpos y llamaron a las autoridades fueron Jair Ruiz, conductor y asistente personal, y Jhonier Rodolfo Leal, hermano del estilista. Recientemente, Ruiz le relató a la Fiscalía lo ocurrido el día de los hechos, según lo reportó revista Semana. Explicó que su jefe le había pedido no llevar a nadie a su casa en la mañana, por lo que se dirigió directamente a la peluquería de Leal en la Zona Rosa de Bogotá. Allá empezaron a llegar las primeras citas, participantes del concurso Miss Universo que iban a firmar un contrato con Leal, como el estilista debía estar presente, Ruiz fue a buscarlo junto con el hermano, porque no respondía el teléfono.
Ruiz contó que fue el primero en entrar a la vivienda, pues Jhonier Leal se quedó afuera hablando por teléfono. El silencio total se le hizo sospechoso y decidió salir. Al ver que la ventana de la habitación estaba sin seguro, se asomó y vio los cuerpos, les llamó sin recibir respuesta y Jhonier le indicó que no tocara nada, ahí decidieron llamar a la Policía.
La primera hipótesis de la Fiscalía señalaba un doble suicidio, luego se pensó que Mauricio había asesinado a su madre y se había suicidado, pero pronto se determinó que se trataba de un asesinato y que al estilista lo habían obligado a escribir la nota que dejaron al lado de los cuerpos. Además, el fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, afirmó que se había abierto una investigación por lavado de activos, pues se encontraron movimientos financieros sospechosos en las cuentas y bienes de Leal y su madre.
En medio de esta investigación, se allanaron la vivienda de Leal, la peluquería y una bodega, donde se encontraron documentos que evidenciaron transacciones financieras de empresas con origen desconocido.
Señalamientos
Por lo que se leía en la nota, los ojos de la opinión pública apuntaron a Jhonier como sospechoso por el doble asesinato, pero este negó las acusaciones y dio a conocer que en la familia hay un tercer hermano, que vive en el Valle del Cauca, de donde son originarios. Además, afirmó que no tenía conocimiento de las finanzas o los seguros de su hermano y que la Fiscalía congeló las cuentas bancarias de la peluquería, por lo que los gastos funerarios tuvieron que ser asumidos por terceros. Jhonier no está siendo investigado por la Fiscalía y está vinculado al proceso en calidad de víctima.
Hace unos días, la revista Semana reportó que ya se habían empezado a repartir los bienes de Mauricio y que Jhonier había sido nombrado gerente de su empresa, mientras que los hermanos de Marleny Hernández habían decidido no tomar parte de la sucesión, pues temen por su seguridad, y reclamaron a la Fiscalía evitar las filtraciones relacionadas al proceso a los medios de comunicación.
Según el ente investigador, además de las inyecciones de capital que se encontraron injustificadas en las cuentas de Leal, también se vio en las grabaciones de las cámaras de seguridad de la casa y la peluquería que algunas personas en autos de lujo estuvieron rondando las propiedades días antes de los hechos. La Fiscalía afirma que ya tiene identificadas a estas personas y está indagando su interés en las propiedades, pero no se hará ninguna captura hasta finalizada la vacancia judicial, el 11 de enero.
De acuerdo con indagaciones del periódico El Tiempo, el estilista no solo tenía estos bienes, sino que además contaba con un restaurante, un apartamento y un negocio de inversión en bienes inmuebles. No era la primera vez que sus finanzas se encontraban en tela de juicio, ya había sufrido una estafa por parte de un contador y había estado en la Lista Clinton por asociarse a empresas vinculadas a los hermanos Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela, del cartel de Cali.
Esta semana, Noticias Caracol reportó que la Fiscalía tendría pruebas de que las cuentas bancarias del estilista habrían sido utilizadas para mover millonarias sumas de dinero pertenecientes a “La gran alianza”, una organización criminal compuesta por exmiembros del cartel del Norte del Valle, entre ellos Javier Sánchez Hernández, alias Mueble fino, capturado el 22 de mayo de este año en Chía, Cundinamarca.
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