El proyecto de revocatoria contra el alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, entró en marcha este lunes con la inscripción de dos comités ciudadanos ante la Registraduría Nacional. El reto inmediato de los comités, Revoquemos a Peñalosa y Unidos Revocamos a Peñalosa, será recolectar al menos 271.818 firmas para que se lleve a cabo la votación que definiría el futuro del mandatario.
Peñalosa, de acuerdo con las últimas encuestas, tiene una imagen desfavorable cercana al 67 %. Con esta cifra, los comités ciudadanos justificaron la solicitud de revocatoria, pues la Ley 134 de 1994 incluye la “insatisfacción general de la ciudadanía” dentro de los motivos para que se adelante un proceso de revocatoria de mandato.
El vocero de Unidos Revocamos a Peñalosa, Sergio Fernández, argumenta que la continuidad del mandatario “representa daños irreparables para Bogotá”. Existen, según él, decisiones que no tendrían reversa, como “la venta de la ETB, la construcción de proyectos inmobiliarios en la Reserva Thomas Van der Hammen y el cambio de un metro subterráneo por uno elevado”.
Fernández es cercano al senador y hoy precandidato presidencial del Polo Democrático, Jorge Enrique Robledo. Su comité es respaldado por organizaciones sindicales como la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y Fecode. “Es una tarea que va a exigir muchos recursos económicos y los sindicatos están dispuestos a respaldarnos. De hecho se han venido acercando partidos como el de la U y el Liberal”.
El vocero del segundo comité es Leonardo Puentes, quien también fue impulsor de la campaña “Petro no se va” durante 2014, cuando el exalcalde Gustavo Petro fue destituido por la Procuraduría General de la Nación. Según Puentes, en 15 días tendrán listas las planillas para comenzar a recoger firmas.
Si los comités logran recolectar las 271 mil firmas que se necesitan para que la Registraduría convoque a la votación, a las urnas deberán asistir, como mínimo 1.092.229 personas. En caso de que a favor de la revocatoria voten 545.115 ciudadanos, Peñalosa tendría que abandonar el cargo. Sin embargo, ningún proyecto de revocatoria ha prosperado en Colombia.