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¿Quién es Kendrick Lamar, el rapero que es tendencia con su nuevo disco?
El músico californiano es uno de los representantes más importantes del hip hop estadounidense, sus letras lo llevaron a ganar el Premio Pulitzer en 2018.
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Lamar estuvo en Colombia en 2019, durante el Festival Estéreo Picnic. FOTO EFE
13 de mayo de 2022
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En Straight Outta Compton (2015), una película producida por Dr. Dre, se puede ver que, más allá de la problemática de bandas de traficantes y drogas que reinaban en los barrios marginales de la ciudad californiana, la verdadera confrontación era con la policía. Hombres blancos que hacían sentir a cada oportunidad que ellos eran los que tenían el poder en los vecindarios negros. No era una cuestión de crimen, sino de raza, no importaba si un joven era inocente, al encontrarse con la policía seguramente iba a ser maltratado y lo mejor era que lo dejara pasar, evitara cualquier respuesta, porque podría ponerse peor. Escenario que aún hoy es factible.
La película retrata el ambiente donde se formó el hip hop californiano, cómo se juntaron y empezaron a trabajar quienes llevarían el género a lo más alto del mercado de los Estados Unidos, tal vez el más importante del mundo. Dre, Eazy-E y Ice Cube fueron los pioneros, por esa época Kenny Duckworth, hacía parte de la banda Gangster Disciple, más adelante se convertiría en el padre de Kendrick Lamar.
Duckworth era un músico aficionado, nombró a su hijo en honor a al cantante Eddie Kendricks, de The Temptations, y era parte del movimiento que cambiaría la cara de Estados Unidos. Cuando tenía 8 años, Kendrick estuvo con su padre en el set del video de “California Love”, la canción de 2Pac y Dr. Dre que se lanzó como primer sencillo del álbum All Eyez on Me (1996), el disco que sacó Tupac al salir de la cárcel. Ese año lo asesinaron.
Ocho años después, cuando tenía 16, Kendrick empezó a sacar sus primeras mezclas, bajo el seudónimo K-Dot y, en el 2014, Top Dawg Entertainment lo firmó, la disquera con la que acaba de publicar su último álbum Mr. Morale & The Big Steppers, y con cuyo lanzamiento dio por terminada la relación de 17 años que tenía con la compañía. Aunque no es claro con quién seguirá trabajando Kendrick, probablemente sea de manera independiente, bajo sus propios términos.
Así ha llevado su carrera, manteniéndose fiel a su estilo (que no es el más comercial), hasta obtener primero reconocimiento, luego popularidad. Tanto que se convertiría en el primer representante de su género musical en ganar un Premio Pulitzer en la categoría de composición (galardón que han recibido en su mayoría compositores de música académica), el mismo año que salió la banda sonora de Pantera Negra, de Marvel Studios. Mientras la calidad de su trabajo era reconocida por el circuito intelectual de su país, una de las compañías más comerciales lo consideraba capaz de hablar el lenguaje pop.
En 2015 había lanzado su primer número 1, To Pimp a Butterfly, que fue el álbum con más reproducciones en un mismo día en Spotify hasta ese momento, y en 2017 salió DAMN, con el que ganó un Grammy y se subiría al Olimpo del que ya nadie lo podrá bajar.
Después de cinco años de silencio, está lanzando 18 canciones divididas en dos discos, bajo el título Mr. Morale & The Big Steppers, donde no deja de ser reflexivo y analítico, pero ahora sus angustias son cada vez más globales, tal vez pensando en el futuro de sus hijos. Ya el barrio no es tan hostil, pero el mundo los sigue esperando.
Tanto su música, como su trabajo audiovisual esconden capas y capas de complejidad, que no impiden el disfrute desprevenido, pero que asombran una vez se pueden leer por completo. El disco ya acumula casi 10 millones de reproducciones, solo en la plataforma YouTube.
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