Por luz élida molina marín
Los sancochos de doña Marianela González, madre de Yerri Mina, son poderosos. Eso afirma su sobrino Camilo Javier Mancilla, quien llegó a Envigado en busca de un lugar en la titular para ser protagonista de la Liga Águila con el equipo naranja.
Camilo, quien se formó junto a Yerri reconoce que ahora que su primo está en el Barcelona de España, todas las miradas apuntan sobre los jugadores de Guachené, tierra en la que crecieron y que por estos días está de fiesta, pues uno de sus hijos ha tocado la gloria.
Según ellos, es esa sazón la que hizo que estos jóvenes, Yerri, Camilo y su otro primo Cristian, crecieran fuertes y potentes, condiciones que les ayuda a sobresalir en el deporte y la posición que los tres eligieron: defensores centrales.
Camilo es un año mayor que Yerri. A sus 24 años suma experiencia como profesional con Atlético Huila, Uniautónoma y La Equidad y llega a Envigado con la esperanza de ser referente, de aportar seguridad en la defensa para que el equipo paisa sea protagonista y salga de la zona del descenso en la que arranca en este 2018.
“Yo soy más rápido que Yerri, pero él es más fuerte en el juego aéreo ofensivo; ambos vamos bien arriba en defensa. Espero convertirme en un referente del equipo y que el nombre de Guachené y sus futbolistas quede en lo alto”, afirma.
El profe Rubén Darío Bedoya, técnico del cuadro naranja, le ha pedido solidez defensiva y que aporte seguridad atrás. Eso espera brindar, ya que es uno de los tres refuerzos confirmados del equipo envigadeño para la Liga. Los otros son el lateral Nicolás Giraldo y el delantero Wilfrido de la Rosa.
Y si marca un gol, seguro lo celebrará bailando, pues asegura que tiene el mismo swing del primo, porque el fútbol, el sabor, la calidad y el baile son cualidades heredadas de su familia.
Por ahora, Camilo trabaja fuerte para quedarse con la titular, pues la competencia ha sido dura en la pretemporada del equipo antioqueño .
