Varias cosas han marcado la vida de Elizabeth Toro Castañeda: el abandono de su padre -que obligó a su mamá a ejercer las dos funciones en casa-, el estudio en la universidad Eafit, y el deporte del ajedrez como razón de ser en su vida.
“Más que los títulos, el ajedrez me ha ayudado a ser persona, a vibrar, a no ser una joven apática como lo era antes de practicarlo y a saber convivir con la gente. Eso es lo principal”, dice esta chica, quien es una de las favoritas para ganar el título del Nacional sub-20 que abre hoy en Medellín.
Elizabeth se levanta todos los días bien temprano (6:00 a.m.) para trasladarse desde Manrique Central, donde vive, hasta el Eafit o la sede de la Liga, que son los dos sitios que a diario frecuenta.
Antes de dedicarse al juego ciencia, la estudiante de tercer semestre de Ingeniería de Procesos, probó en el porrismo, el baile deportivo y el voleibol, pero algo la llevó a encariñarse con el movimiento de piezas sobre un tablero.
“De niña comencé a probar con varias disciplinas y en todas me fue bien, pero el ajedrez me entregó sensaciones diferentes, sentía la necesidad de estar jugando cada rato y me motivaba a perfeccionarme en todo momento. Me hizo sentir plena y por eso, después de los 12 años (hoy tiene 18), decidí dedicarme de lleno a esta práctica, que hoy me da cosas muy lindas, como, por ejemplo, haber conocido otros países y grandes personas”.
Su estilo de juego en el tablero es agresivo, de ahí que ya haya sido campeona nacional sub-16 y subcampeona panamericana, dos logros que le permite tener como meta ser campeona en el Nacional sub-20 y ganar el cupo directo al Panamericano.
“En esta categoría tengo todas las herramientas para ganar. Voy a dar todo de mí, jugar tranquila y recompensar a quienes han permitido que llegue tan lejos. Quiero darle el título a Antioquia”, dice Elizabeth, quien es la novata de la Selección Antioquia que estará en los Juegos Nacionales.
Después del evento en la capital antioqueña, su gran objetivo es poder estar en el certamen que tendrá como sede a Bolívar. “Creo que estar en los denominados Juegos Olímpicos del país, es el sueño de todo deportista. Ese es mi gran reto a mediano plazo, porque el inmediato es ser campeona del Nacional y obtener el cupo al Panamericano en Guatemala. Sueño con representar a Antioquia y a mi país”, augura.
Para quien admira a Angela Franco, quien fue su primera entrenadora, todo lo que vive es maravilloso. “Tengo una mamá inigualable, que se gana el mínimo y nos sostiene (a ella y un hermanito de nombre Miguel Ángel que también juega ajedrez), también la posibilidad de estudiar en una gran institución (Eafit). Soy una bendecida del Señor”.