Uno de los misterios de la historia es que si usted, lector, retrocede lo suficiente en las ramas de su árbol genealógico, se dará cuenta de que tiene algún tipo de parentesco con cualquier personaje histórico del mundo. Eso es un misterio que resulta muy divertido. Y precisamente eso es lo que están celebrando los swifties después de que la empresa Ancestry anunciara un lejano parentesco entre la diva del pop Taylor Swift y la poeta Emily Dickinson, una de las voces más importantes de la literatura de los Estados Unidos.
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“Tanto Swift como Dickinson descienden de un inmigrante inglés del siglo XVII (el noveno bisabuelo de Swift y el sexto bisabuelo de Dickinson, que fue uno de los primeros colonos de Windsor, Connecticut)”, informó la empresa. Aunque, en este caso, el parentesco es muy lejano, eso no ha sido óbice para el entusiasmo de los fans de la cantante estadounidense. También es cierto que todo lo relacionado con Swift genera una especie de histeria en redes sociales. Un ejemplo de ello es el tono con el que inicia la publicación de Ancestry: “Necesitamos calmarnos... ¡¡pero cómo podemos hacerlo cuando tenemos GRANDES noticias!?”
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