Aunque antes se habían grabado novelas inspiradas en personajes famosos, el género de las bionovelas parece haberse institucionalizado con las series, historias que se han caracterizado, en su mayoría, por mostrar la vida de narcotraficantes y cantantes colombianos.
Dos de los ejemplos más exitosos fueron Escobar, El patrón del mal, que recreó la vida del narcotraficante Pablo Escobar, y La Ronca de Oro, que mostró la vida de la cantante de música popular Helenita Vargas, emitidas en 2012 y 2014, con índices de audiencia de 26,9 y de 15,3, respectivamente. A pesar de la diferencia entre el narco y la artista, las dos producciones se consolidaron por su rating en las noches, siendo el estreno de Escobar el más visto en la historia de la televisión colombiana.
Los Tres Caínes, Galy Galeano, Diomedez Días, el Joe Arroyo, Celia Cruz, Las Hermanitas Calle, Pambelé, La Selección y Lady Tabares fueron algunas de las apuestas de los canales nacionales donde la muerte, las tragedias, los desengaños, los amores y las traiciones desarrollan diferentes historias. Detrás hay un objetivo: sumar audiencias.
Aunque algunos preferirán la ficción, las bionovelas y su rating han demostrado el interés de los colombianos por acercarse a la vida de personajes populares. Actualmente se habla de más bionovelas donde mostrarían a Jaime Garzón, Alfredo Gutiérrez, Falcao, Patricia Teherán, Kaleth Morales y hasta Gabriel García Márquez, lo que representaría una nueva categoría en estas historias, que no se habían interesado antes en la vida de los escritores.