Muchos se maravillan con la inmensidad del océano, pero el inglés Jeremy Wade prefiere las aguas oscuras y turbias de los ríos del planeta y en esta séptima temporada de Monstruos del río, de Discovery, trae más criaturas extrañas e interesantes para conocer.
¿De dónde viene esa pasión de buscar peces en los ríos?
“Empezó cuando tenía 7 u 8 años en Inglaterra. Cerca de mi casa había un río muy pequeño y mis padres me regalaron una caña de pescar, pero ninguno de la familia sabía cómo hacerlo. Entonces, cuando fui al río no tuve ningún éxito (risas), pero cuando capturé mi primer pez, sentí que tenía acceso a otro mundo, a muchas criaturas que no conocía y eso despertó mi curiosidad, quise investigar cuál iba a ser mi siguiente pez y qué otras sorpresas me podían esperar”.
¿Cuáles monstruos te han llamado más la atención?
“Hay una lista larga (risas). He grabado más de 50 programas, pero 3 o 4 de ellos me llegan a la memoria: el primero que hice fue en la India donde capturé un bagre grunch, que es bastante grande, tiene dientes muy filosos e intimida mucho. Hubo otro en un lugar de difícil acceso en el Congo, África, y es el pez tigre Goliat. En este lado del mundo, en Colombia y Brasil, está la Arapaima, que se dice es el pez de agua dulce más grande del mundo y alguna vez me pegó en el pecho y me dejó un dolor de seis semanas. Ese recuerdo estará vivo siempre.”
¿Hay un río que quieras explorar o un animal que aún no hayas podido encontrar?
“Sí, no he visitado China y es porque muchas de las especies que le interesarían al programa ya han desaparecido. Habría un candidato y es el pez espátula gigante que, por muchos años, fue el más grande del mundo, pero oficialmente parece estar extinto. Y aún si no, no sería fácil capturarlo”.
¿Cuáles son las implicaciones que tiene entrar en el hábitat de estos peces y qué precauciones tomas?
“La idea del show es mostrar estos peces en cámara, que son potencialmente peligrosos, pero de una manera segura para mí y el pez. En los lugares que nos movemos no podemos llamar una ambulancia si pasa algo, entonces tenemos un entrenamiento en medicina de trauma para que podamos reaccionar de la mejor manera ante cualquier situación. Lo principal es tratar de evitar el peligro lo más que podamos. En casos extremos tenemos un teléfono satelital”.
¿Qué tantos “monstruos” podemos hallar en ríos de Colombia?
“Hace un par de años vinimos a Leticia a buscar las rayas, porque todos conocen las pirañas, pero en su mayoría no son tan peligrosas. Los locales temen más a las rayas, que no matan, pero sí reaccionan con su púa en la cola, que puede producir infección y un dolor fuerte”.
¿Ha pasado que buscando un animal encuentra otro?
“Sí. Normalmente no tenemos idea quién es el responsable de los casos que investigamos y hacemos una lista de sospechosos. A veces el culpable no es un pez, es otro animal que vive en el agua como una anaconda o un cocodrilo”.
Te has sumergido en muchos ríos, ¿has pensado sumergirte en el océano?
“Hemos hecho algunos programas en desembocaduras de ríos y por ende hemos estado en aguas saladas, pero originalmente no es el plan del programa, porque existen muchos documentales muy buenos sobre las criaturas del mar. Nos gustaría explorar la idea de entrar al océano, pero a nuestro estilo”.
¿Te gusta comer pescado?
“(Risas) Claro que sí. Para mí es importante saber qué pez es y de dónde viene, si es de una fuente sostenible. No tengo un apetito grande y prefiero no comer especies grandes porque están en peligro de extinción. Prefiero otras como el pez tambaquí, que se alimenta de semillas de árboles y tiene carne blanca muy fresca. Lo limpio, le agrego sal y lo pongo a la brasa”.
¿Habrá octava temporada?
“¡Sí! (risas)”.
¿Qué hace Jeremy fuera del agua?
“Esto es un trabajo de tiempo completo y es agotador. La mayoría del tiempo libre la paso recuperándome. Ahora, ‘las vacaciones de un conductor son seguir manejando’, dicen en Inglaterra, entonces me gusta ir a bucear (risas)”.