Las plazas de mercado en el mundo son los lugares perfectos para conocer y comer bien. Allí se aprende de idiosincrasia, de historia, de sabores y cultura, eso es gastroturismo y es la segunda razón para que los turistas viajen por el mundo luego de buscar playa, brisa y mar.
En Antioquia a eso no le damos la importancia adecuada. El valle de Aburrá afincó sus atractivos turísticos en los mismos servicios públicos necesarios para el cotidiano vivir de los ciudadanos. Los paisas nos dedicamos a montar ladrillos sobre ladrillos y pegar cemento. Medellín se vende con el metrocable, el tranvía o el metro, es decir, con los medios de transporte diarios para el público local. A nadie se le ocurre visitar Medellín para comer en una de sus plazas de mercado.
Ir al parque Arví o a lo mejor al olvidado Pueblito Paisa, pueden ser tal vez, los únicos dos atractivos diferentes a los mencionados. Si eso es Medellín, imagínese lo que pasa en los municipios circundantes.
En Itagüí tienen algunos parques mejorados, como el de la entrada, creo que se llama el parque del Reto, o algo parecido. La plaza de mercado pudo ser un atractivo turístico, si la hubieran organizado con buenos locales de comida y productos para la venta. Con una decoración, arquitectura adecuada y zonas de parqueo, pero no, decidieron derrumbarla, ahora será un centro comercial, como si no hubiera suficientes.
Toda la vida en este municipio se ha despilfarrado su presupuesto, que supera incluso al de algunas ciudades capitales del país. Al parecer en los últimos años las cosas mejoran, sin embargo, a ningún paisa se le ocurre montar paseo turístico al municipio del cacique Bitagüí.
Bello, ¿qué tiene ese municipio para ir a conocer? Aparte de ser uno de los lugares más peligrosos por la cantidad de bandas, usted pude ser detenido por los guardas de tránsito locales, que fijan su mirada en los conductores apacibles, pues los motociclistas sin casco y veloces no son detenidos ni cuando montan con tres personas en los aparatos. Lo que si tiene Bello, es su plaza de mercado. Señores administradores locales, salven esa plaza, mejórenla, apoyen los comerciantes, ayúdenles, ahí pueden tener un bastión gigante para atraer público, claro, si por otra parte combaten en serio las agrupaciones criminales.
Envigado por su extensión hacia el oriente, tiene sitios cercanos para conocer, también tiene plaza de mercado, pero aun así debe mejorar. Implementó el concurso de morcillas en sus fiestas del carriel, lo que habla bien de su cultura y protección del ancestro, no obstante, a la plaza deben darle un aire más turístico, promover la visita a sus locales, las ventas de morcillas y empanadas, además de los sitios de cocina popular bien hecha.
En general los otros municipios tienen la misma carencia, desde Barbosa hasta Caldas. Estoy seguro de que la mayoría de burgomaestres locales hacen gastroturismo en Madrid, Barcelona o Roma, habrán comido unos buenos platos en sus plazas de mercado y dirán felices: ¡qué rico poder comer acá!, pero por alguna razón misteriosa no lo ponen en práctica al regresar a su tierra, ¿por qué será?..